Capítulo XXVI || Ein Brüder und deine Schwester

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RHEINE


Los hermanos estaban celebrando con vino, carne y cerveza. El mismísimo conde Ferdinand Blauenblud había arribado a Mondhaffen para celebrar la victoria de la orden de Ahri contra los saqueadores Norse. Rheine había sido señalada como la copera del gran Maestre Engelbert, quien se encontraba hablando con el conde Ferdinand. El conde era casi como una aparición para la joven Rheine. Pues los rizos dorados del muchacho, su cara angular con hermosas facciones varoniles era, muy diferente al del resto de los reclutas de la orden, así mismo, el aroma del hombre era muy diferente, olía a jabón y perfume. No a estiércol de caballo, tierra y sudor.

—Le dije a Hannes exactamente sobre esta situación. —Gruñó el conde Ferdinand entre dientes. —¿Pero me hizo caso? No. Ahora nosotros tenemos que lidiar con esto.

—La reina Hannes sigue siendo muy joven, aprender a gobernar un reino, toma una vida. —Respondió el gran maestre mientras daba otro sorbo a su copa de vino. —Pero no me queda duda que ella aprenderá, siempre cuando cuente con nosotros. ¿No lo cree conde Ferdinand?

—¡Pero, por supuesto que sí! —Exclamó el conde Ferdinand inmediatamente y luego lanzó una sonrisa nerviosa, el joven conde bebió de la copa que tenía en las manos. —Larga vida a la Reina Hannes. —Ferdinand entonces alzó su copa, para brindar con el gran maestre.

—Y que largo sea su reinado. —Respondió el gran Maestre Engelbert. Las dos copas chocaron y un poco del vino dulce fue derramado. El Gran Maestre entonces bebió del interior de su copa y reanudó su conversación con el conde. —¿Y su hermana Katrin?, Esperábamos ansiosamente su llegada, mis muchachos estaban emocionados cuando supieron que Katrin vendría.

El conde Ferdiand dio un sorbo a su copa. —Katrin está en Lufftsmutter, escuché que los mismos Norse que atacaron la costa, se fueron a refugiar allá. Katrin ha ido a terminar con ellos de una vez por todas. —Dijo el conde Ferdinand, el joven se bebió toda su copa y luego la levantó y la agitó levemente en el aire, esa era la señal de Rheine para rellenar la copa del conde. El conde entonces fijó su mirada en Rheine. —Muchacho, ¿Cuántos años tienes?

—¿Yo...? Die...dieciséis mi señor. —Respondió Rheine.

—Ja... te ves muy escuálido para tener 16 años muchacho, la voz ni siquiera te ha cambiado. —Entonces el conde volteó a ver al gran maestre. —¿Qué ocurre Gran Maestre, no les alcanza el alimento?

El Gran Maestre sonrió. —Rheine es diferente al resto de los hermanos. Él no tendrá la complexión de un guerrero, pero tiene más músculo en la cabeza que cualquier otro de los reclutas aquí. Él me salvó la vida en el ataque de los Norse. —Al finalizar, el Gran Maestre dio una sonrisa. El conde Ferdiand entonces volvió a mirar a Rheine.

—Entonces, supongo que tengo que agradecerte muchacho. El Gran Maestre Engelbert, me salvó la vida en la batalla de Weinland. —El Conde Ferdiand le tendió la mano a Rheine, el corazón de la chica dio un salto y le aceptó el saludo, la mano del conde era suave, y aun así tenía callosidades en la palma, era el resultado de alguien que había usado la espada para practicar durante horas. Luego la chica regresó a su lugar en la esquina hasta que volvieran a requerir que rellenaran las copas.

Rheine miró hacia las mesas, ahí estaba Aksel sentado con un tarro de cerveza en las manos, junto con los otros reclutas, riendo y celebrando. Cuando uno de ellos le susurró algo en el oído. Aksel al instante esbozó una sonrisa y le preguntó algo al otro recluta, quien solo asintió con la cabeza. Aksel se levantó de la mesa y salió en compañía de otros tres reclutas. Rheine tenía mucho interés en saber que era todo eso. Pero el Gran Maestre no parecía estar interesado en liberar a la chica. Rheine entonces se le ocurrió una excusa. La chica le fue a contar al gran Maestre que se había acabado el vino y que iría a la bodega por una nueva ánfora. El Gran Maestre Englebert asintió con la cabeza y Rheine quedó eximida de sus responsabilidades.

La Última Reina II: Confrontación de Coronas.Where stories live. Discover now