Siempre, 7 veces si.

La teta de Rigoberta

V.- Es igual Moni

M.- Anda ya, es que ves mis pechos por todos lados

V.- Eso también, pero mira.... mira fíjate bien

M.- Ay como eres

V.- Espera un poco y verás.- Tomé una pausa para besar el pecho de Mónica y sobre todo su pezón izquierdo

V.- ¿Lo ves?

M.- Bueno si tu lo dices, te compro que mi pecho izquierdo es igual que la teta que sacó Ribogerta en el festival de anoche

V.- Es clavado

M.- Pues ves, al final, te has quedado con el premio tu

V.- Asi es, uhmmmmm.- seguí besando su pechos con dulzura y amor

Narra Mónica

Después de ganar mi apuesta, me fui a dormir, estaba cansada, me puse el pijama y no me di cuenta ni cuando Vanesa se acostó a mi lado.

Al día siguiente teníamos citas cada uno por su lado, yo con mi editora para hablar un poco de la siguiente novela, o si hacíamos otro libro con microcuentos que también tenía unos cuantos y Vanesa con Warner para seguir concretando fechas de la gira y ultimar detalles del viaje a estado unidos. Seguro que iban a a ser dos semanas, se habían alquilado una casa en un barrio típico de Miami en vez de coger un hotel, y tenían también un chofer para los traslados a las distintas televisiones a las que tenía que acudir, por otro lado también tenía citas con músicos de allí, eso era lo que más ilusión tenía, se le veía cuando hablaba con ellos por skipe o por videollamada, se le iluminaba la cara cada vez que le decían lo que tenían pensado para sus canciones.

Yo por supuesto como ganadora de la apuesta no le iba a perdonar nada de lo apostado, se había venido muy arriba con el tema pues ahora lo tenía que pagar.

V.- Cariño

M.- Dime

V.- He pensado  que....

M.-¿Qué? je, je

V.- Pero porque te ríes si todavía no te he dicho lo que he pensado...

M.- Es que seguro que es algo de la apuesta

V.- Tu...tu... ¿Tu me lees el pensamiento?

M.- Soy bruja Martín

V.- Bueno, a ver.... como te debo dinero, he pensado en quedar después a comer tu y yo y pago mi apuesta, ¿Te parece?

M.- Me parece una idea estupenda....¿Elijo yo restaurante?

V.- Uhmmmmm no.... te voy a sorprender, hay un sitio nuevo que me apetece ir a ver que tal está

M.- Venga vale, cuando salgamos de las reuniones, nos hablamos y me dices donde voy

V.- Vale, voy a ver si tienen sitio para hoy y reservo

M.-Perfecto

Narra Vanesa

Estaba claro que había perdido la apuesta y por goleada, no es que no me gustara Chanel, me parece una niña muy linda, guapa, una bailarina excelente que ya me gustaría a mi moverme así.... pero no se la canción de Rigoberta la tenía todo el día en la cabeza tarareándola..

En fin.. ya que perdí la apuesta por lo menos en vez de darle el dinero se me ocurrió la idea de invitarla a comer y así por lo menos disfrutar yo también.

Había un restaurante asiático nuevo al que quería ir, tu te sentabas en la barra y la comida pasaba por delante de tí por una banda que se movía, y los cocineros estaban en el centro preparando la comida y llenando las fuentes cada vez que se agotaban, era una especie de buffet pero en plan más guay, como más chic. Tenía ganas de ir, me lo habían recomendado unos amigos y hoy era un buen día para hacerlo, llamé y tenían sitio así que reservé.