La vida sigue...siempre sigue

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"En mi instinto solo islas, sol  y mar....lo del deporte en el prefrontal, qué necesidad ya...."

Narra Vanesa

Yo necesito sol, ahora mismo me iría a Costa Rica, con el pelo recogido en un moño a recorrer su costa, a ir todo el día en bermudas y en camiseta de tirantes...juro que intento hacer deporte de manera ordenada pero soy un desastre...no aguanto tres días seguidos de rutina deportiva...en fin...que le vamos a hacer.

Cuelgo mi video del 2022, hago una selección de fotos de todo el año, he escrito algo bonito, me he acordado también de Elena Huelva, una chica que ha sido ejemplo para todo el mundo en su lucha contra el cáncer con el lema "mis ganas ganan". Mi amiga Sara Carbonero también le ha escrito unos párrafos preciosos. 

Sigo sin noticias de Mónica, no contestó a mi último mensaje, normal por otra parte, hoy leí una frase que me parece tan real:

"Es mejor irse y hacer falta, que estar y no significar nada"

Mónica sigue en Elche, cotilleo sus historias, está haciendo lo mismo que yo pero en allí, paseos por la playa, familia y poco más, desconcectar de Madrid como yo.

Todavía recuerdo aquel primer encuentro en onda cero radio, juro que jamás creí en el amor a primera vista, soy más de ir conociendo a la persona y poco a poco ver por donde va la rueda. No quería enamorarme, pero su sonrisa deshizo letra a letra lo convenido entre mi corazón y mi cabeza. Su risa, su dulzura, esa ternura radiactiva que te hace quemarte con sólo mirarla, no quería enamorarme pero ese día perdí, perdí la batalla y me ganó el alma para siempre.

Avanzamos hacia el fin de la navidad, ya llegan la noche de Reyes, una noche mágica, en muchos sentidos, una noche en la que la ilusión lo llena todo y cuando digo todo es todo.

Narra Mónica

Después del zarpazo de Rodrigo volvemos a la vida, no hay otra. Estas navidades se resumen en: Familia, amigos, Elche y mar. Siempre el mar, mi mar.

Porque la vida sigue, siempre sigue, aunque a veces creamos que se ha sentado a esperarnos.

Se acerca el fin de la navidad, pasaré reyes en Elche, con mis sobrinos, a Alex le he comprado un traje de baloncesto de Pau Gasol y a Vega un maletín con muchas pinturas y rotuladores y yo me he autoregalado unas deportivas para correr, quiero volver a retomarlo poco a poco.Los entrenos en Madrid en  el gimnasio con Sara como coach personal los llevo muy bien, muy motivada así que como reto del 2023 volver a retomar el running.

No he contestado a Vanesa el último mensaje que me envió, creo que se pasó tres pueblos con su llamada, totalmente fuera de lugar, no era mi mejor momento tampoco, lo he dejado estar, no quiero malos rollos.

Hoy he leído un poema de Rafael Cabaliere

A veces la vida se arregla

en otros lugares

conociendo a otras personas

y mirando otras sonrisas.

A veces hay que 

saltar sin miedo,

salir de la jaula,

volver a ser.

Llega la mañana del día 6, abrimos los regalos, no puedo parar de reir, me han regalado un roscón de reyes y junto con mis zapatillas hacen una dupla graciosa, me como todo el roscón y empiezo a correr para perder las calorías que he ingerido.

Me bajo a la playa con Camarón, a pasear un rato, solos los dos, como infinitas veces, no hay nadie a esas horas, solo el y yo, me acuerdo de la última noche de reyes, la anterior, que la pasé con Vanesa en Málaga, ella si que era mi reina maga junto a mi sobrina Vega claro está, ella tenía esa magia que no podía encontrar en nadie más. No sé si eran sus ojos, sus labios, su cabello o solo esa forma peculiar que tenía de mirarme, con esa intensidad como si quisiera desnudarme cada vez que lo hacía, tenía la capacidad de alegrarme el día con una sola sonrisa. Cuánto amor nos habíamos dado la una a la otra, cuantas noches bajo las sábanas explorándonos la una a la otra, hablando hasta la madrugada de cosas bonitas, de sueños de futuro, de planes juntas. Recuerdo sus detalles cuando volvía de las giras, o cuando estaba cuatro o cinco días fuera de casa, siempre me dejaba algo, alguna nota escrita, algún detalle pequeño, a veces sólo un bombón de chocolate negro eso sí con su nota de amor. 

Me encantaban esas cosas de ella, como me buscaba entre la gente cuando estábamos con amigos, me miraba y me sonreía con los ojos, si estábamos juntas me buscaba por debajo de la mesa, ella seguía en la conversación de todos tan normal pero con su mano me acariciaba el muslo o me cogía la mano.

En fin... detalles que de momento no se iban a volver a repetir, creo que habíamos llegado al punto de no retorno, yo estaba serena y queriendo exprimir la vida intensamente y ella igual que yo, con una gira por delante que no le va a dejar un minuto libre.

Sigo a mis cosas.... con mis pensamientos, Camarón se ha alejado un poco, persiguiendo unos pajarillos, mi móvil vibra y es un mensaje de Vanesa, me ha mandado una foto...no puede ser si es una foto del final de la playa donde yo estoy ahora paseando...¿Está en Elche?, pero...¿Qué hace aquí la mañana de Reyes?

Narra Vanesa

Me despierto pronto la mañana de reyes, muy pronto es todavía de noche, ayer pasé la noche de reyes con mis padres y se fuero pronto a Málaga, me quedé dormida en le sofá viendo una película de Netflix, cogí mi regalo, bueno el que me habían dejado mis padres, eran unas zapatillas para hacer deporte, sonreí por lo chulas que eran y por el poco uso que les iba a dar seguramente.

Recordé las noches de Reyes cuando era pequeña, como todo eran gritos y alegrías desenvolviendo regalos esa mañana, como después pasábamos el día jugando con todo que los reyes nos habían traído, con la ilusión de la magia de la navidad todavía dentro de nosotros.

En ese sentido junto a Mónica había vuelto a encontrar esa ilusión por la navidad, por poner debajo del árbol los regalos, despertarnos pronto para ver que nos habían tráido los reyes o en mi caso mi reina, mi Moni. Mi reina maga....esas mañanas me despertaba con miles de besos, porque yo sino no me iba a levantar ni por un cortijo, pero sabía perfectamente como tocar mi fibra. Esos recuerdos volvieron como un torrente mientras me preparaba un café y veía amanecer desde la ventana del salón. 

No me lo pensé, me puse un chandal, mis zapas nuevas, cogí un abrigo, el bolso con la cartera, el móvil y un cargador y me puse a conducir...en cuatro horas estaría en mi destino.....para las diez y media u once de la mañana podía estar en el lugar favorito de....Mónica

Otra locura, no sé, pero sencillamente me apetecía, en una gasolinera compré chocolate negro a la sal, sería mi regalo de reyes, me tomé otro café y seguí la ruta hasta Elche, bueno hasta Santa Pola, sabía que estaría allí, iba todas las mañanas a pasear un rato y hoy no creo que fallara a su cita.

Llegué, aparqué el coche, cogí las cosas, eché una foto de la playa y le envié el mensaje con la foto

"Melchor dejó algo debajo de mi árbol para ti, te espero en nuestro sitio. V."

Ahora ella tenía la pelota en su tejado, sólo quería disculparme pero quería hacerlo en persona.

Quería hacerlo

Quería.....


Siempre, 7 veces si.Where stories live. Discover now