Siempre, 7 veces si.

Lentejas

M.- Uhmmm ¿No tienes hambre?.- dije mientras un escalofrío me recorría hasta los pies

V.- No.- dije dejándole un beso en su cuello

M.- ¿Sueño?.- dije sonriendo

V.- No.- Esta vez le dejé un mordisco y le saqué la camiseta que llevaba puesta de un plumazo.

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Narra Mónica

Mi regreso a casa fue distinto a como lo había planificado o pensado pero no iba a despertar a Vanesa, así que hice lo que hubiera hecho cualquier día de estos pasados en los que ella no estaba en casa, cena ligera, twittear un rato, ver alguna serie e irme a la cama.

Pensé en dormir juntas pero seguramente la despertaría y preferí que descansara, tenía su móvil por si recibía alguna llamada urgente. Así que cambié de aposentos por una noche y me dormí en la habitación de invitados.

Ya por la mañana intenté no hacer mucho ruido, deshice su maleta, puse la lavadora con la ropa sucia y cuando me fui a dar un paseo con Camarón de paso llevé a la tintorería el traje rosa y alguna cosa más que no se podía meter a la lavadora. 

Dejé todo recogido, a la vuelta del paseo, compré pescado para hacer en el horno y como me había dicho Vanesa que le apetecía comida española, iba a preparar unas lentejas ricas ricas.

Al llegar a casa seguí sin oir a Vanesa todavía, me estaba empezando a preocupar y asomé el morro en la habitación intentando hacer el mínimo ruido posible, puse en alerta el oído y ella seguía durmiendo plácidamente.

Saqué la lavadora para tenderla al sol de la mañana y me puse a cocinar tranquilamente.

Mi móvil sonó, era Ana

A.- Hola guapa

M.- Hola ¿Qué tal?, ¿Vinisteis agotadas?

A.- Yo vine casi todo el vuelo durmiendo, Vanesa ya sabes que es un poco desastre para dormir

M.- Pues lleva ko desde anoche, me he tenido que asomar a ver si estaba viva o muerta

A.-¿En serio?

M.- Si, si, y sigue durmiendo

A.- Madre mía, je, je, je.

M.- ¿Le digo algo?

A.- Ay, si. El miércoles sobre las cuatro pasaré a recogerla para irnos a Mallorca

M.- Ah, vale, yo le aviso tranquila

A.- Tenéis dos días para aprovecharlos

M.- A ver cuando se despierta la bella durmiente...¿Quieres venir a comer?

A.- No, no, cuando se levante creo que se te va a querer comer entera a ti je, je, je.

M.- Ay Ana, je, je.Te dejo que se me queman las lentejas. Nos vemos el miércoles.

A.- Si, un beso guapa.

M.- Otro para ti.

Terminé de cocinar y me puse a escribir un rato, estos días había aprovechado para darle forma a diferentes ideas que tenía en mente, ya estaban empezando a moldearse las historias.

Estaba tranquilamente cuando......

Narra Vanesa

Despierto despacio, con unas ganas enormes de hacer pis, yo creo que me he despertado por eso, porque me estaba haciendo pis.

Ya me desesperezo un poco y busco a Mónica en la cama pero no la encuentro, ¿Qué hora será?, busco mi móvil pero no se donde para. No oigo ruidos pero al subir la persiana veo que es de día y bien de día, no está ni mucho menos amaneciendo. Pero ¿Qué hora es?....