Vanesa summer I

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Seguía con mi verano de conciertos, kilómetros y más kilómetros por toda la geografía española, Castellón, Sitges, Sant Feliú de Guixols.... inspirada para escribir cosas bonitas, rodeada de mi gente que me está cuidando como nunca, saben que no lo estoy pasando bien pero poco a poco voy ordenando mi cabeza y sintiendo que todo tiene un sentido, un porque.

Me quedo unos días en le pueblo de Alba mi violonchelista, chica tímida, observadora, introspectiva y a veces muy seria, rodeado de tanto andaluz al final le sacamos la sonrisa pero es algo tímida y le cuesta abrirse a los demás.

Ana.- ¿Te quedas entonces unos días?

V.- Si, me ha invitado Alba a su pueblo y a conocer esta zona de Gerona y me quedo

A.- ¿Te quedas el coche?

V.-No, lleváoslo, bajaos vosotros a Málaga en el, yo cogeré transporte desde Barcelona, sin pobema

A.- Vale chula, descansa ¿Vale?

V.- Si, lo necesito, paseos, algo de monte y naturaleza y comer rico

A.- Vamos hablando

V.-Vale

Selva de Mar, un pueblo precioso, pequeño, en el alto del Ampurdán, con playa y monte, con una fortaleza, uno de los pueblos más bonitos de la costa brava, y no me extraña la verdad.

Vamos a casa de los abuelos de Alba, me encantan los abuelos, su sabiduría, su educación, su saber estar, su abuela me lleva a la que va a ser mi habitación esos días, se llama Montserrat, para los amigos Montse.

Mo.- Esta será tu habitación, era la de mi hija mayor, es sencilla pero  muy fresquita, estos días de tanto calor...

V.-Es perfecta, muchas gracias por su hospitalidad

Mo.- De tu por favor, que tampoco soy tan mayor, la Alba hacía tiempo que no venía con ninguna amiga, amigos ha traído a pocos la verdad, je, je.

V.- Es una niña lindísima, tiene una sensibilidad muy especial

Mo.- Si, la ha tenido desde pequeña, la música le vino que ni pintada para expresar todo lo que siente por dentro, le cuesta abrirse a los demás

V.- Si, ya lo he notado pero bueno no pasa nada, cada cual tiene su forma de ser y hay que respetarla

Mo.-Por supuesto, deja tus cosas y te vienes al patio de atrás que pronto comeremos

V.- Vale, perfecto.

Pasamos unos días estupendos, conocí a Alba un poquito  mejor, hablamos de nuestras cosas, de este mundo de la música en el que nos perdemos muchas cosas familiares y de amigos por ella. Estoy feliz la verdad pero de vez en cuando me entra un poco la nostalgia de veranos pasados, sobre todo de veranos pasados con Mónica, Cádiz, Formentera, Málaga.... me vienen a la mente retazos de momentos, lugares, risas, roces de piel y me invade un momento de melancolía....

Estábamos paseando por el pueblo, tranquilamente, la gente estaba cenando en terrazas, los niños jugando a la pelota, las calles poco iluminadas, las puertas de madera desconchada de las calles empinadas.....con nuestros silencios que no eran para nada incómodos sino todo lo contrario....

Alba.-¿Piensas en ella?

V.- Te podría contestar que a todas horas....

A.- Supongo

V.- Pero cada vez voy soltando más lastre de ese barco

A.- ¿Por que la has soltado de tu lado?

V.- Por mi, por puro egoísmo mío, de no querer echarla de menos, de no tener que decidir entre ella y mi carrera, entre ella y la música

Siempre, 7 veces si.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora