El hombre de la casa

Capitulo 103

"Lo digo en serio..." Traté de esquivar las manos de Jennifer mientras se volvía más agresiva. "¿De verdad vas a destruir la relación con tu hija por esto? ¿Qué hay de tu esposo?"

Estaba completamente sorprendida de que ella no pareciera conmovida por mi protesta. Después de todo, era una adulta y tenía marido e hijos. La idea de que ella actuaría de esta manera y sería tan imprudente me dejó impactado. Quería ser firme con ella, pero lo único que se ponía firme era mi erección, que parecía traicionarme. Tan pronto como lo vio erguido, fue como una hiena saltando sobre él. Ella lo tomó en sus manos y comenzó a acariciarlo.

"Estás diciendo que Samantha es incluso mi marido..."

Me levanté de golpe, sintiéndome como si me hubieran abofeteado. "¿Ella no es?"

"¿Estás triste porque no eres mi primera aventura?" Preguntó con un tono burlón. "Tuve una aventura en ese entonces y quedé embarazada. El verdadero padre de Samantha no era el tipo de marido que yo quería que cuidara de mi casa, así que naturalmente me casé con mi marido".

Dijo esas palabras casualmente y luego se inclinó en mi regazo, su boca se dirigió a mi polla. Sus palabras habían causado que me congelara en mi lugar. ¿Cuáles eran las posibilidades de que mi amigo de la infancia tuviera una educación similar a la mía?

La única diferencia fue que donde mi mamá y mi papá no pudieron permanecer juntos, Jennifer engañó con éxito a su esposo y permaneció casada todo este tiempo. Cuántas otras aventuras había tenido Jennifer a lo largo de los años. Siempre había dado por sentado que me perseguía, pero estaba empezando a darme cuenta de que la madre de Samantha era un poco depredadora.

Eso me dejó pensando en mi padre, quien también había engañado a mi madre y luego la había dejado conmigo. Cuando papá reapareció recientemente en mi vida, todo lo que quería era volver a conectarme con él. Después de descubrir lo que mamá había hecho, se volvió demasiado fácil descargar toda la responsabilidad sobre ella y perdonar a papá su irresponsabilidad. Sin embargo, le había quitado dinero a mamá, me había puesto en varias situaciones peligrosas y no le importaba una mierda mi seguridad.

La mamá de Samantha era igual. ¿Jennifer era mejor que mi padre? Justo cuando estaba pensando en eso, sentí su lengua tocar mi polla. Reaccioné de repente, mi mente ya estaba llegando a un punto de pánico. Me di la vuelta, tratando de evitar que me tocara. Mi rodilla se levantó y golpeó su cara. Ella se apartó, agarrándose los ojos y dejando escapar un grito.

"¡Mierda! ¿Que demonios?"

"¡Eres un verdadero pedazo de mierda!" Grité, mirándola con enojo.

"¿Me?" Ella respondió bruscamente, cubriendo un ojo. "Estás engañando a mi hija tanto como yo estoy teniendo una aventura. ¿Quién es el verdadero pedazo de mierda? Joder, eso dolió.

"Me voy." Traté de abrir la puerta, pero ella inmediatamente golpeó la cerradura.

"¡No vas a ninguna parte!" Ella respondió sombríamente, alcanzando y agarrando mi brazo.

"¡Para! Hemos terminado. Le respondí, tratando de nuevo de abrir la puerta sin éxito".

"No dije que puedes irte". Extendió la mano, agarrando mi ropa y tratando de arrancarla.

Me di cuenta de que estaba tratando de quitarme los pantalones. Cuanto más la miraba, más me enfadaba. Mi ira no estaba dirigida a ella. Me preocupaba por Samantha, y apestaba que tuviera una madre de mierda, pero era mi padre el que estaba ardiendo en el fondo de mi mente. Había intentado volver a conectarme con él. Traté de ser el hijo que él quería. Sin embargo, me había dejado. Él me había abandonado, sin mostrarme ni una sola vez cómo ser un hombre. ¿Fue tan sorprendente que la cagué tanto?