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Sakura se encontraba caminando por los pasillos de la empresa, hacia un mes que había empezado su entrenamiento, conocía a algunos ya que varios los cruzaba en la escuela. Solo había pasado 4 semanas y ya era bastante conocida y fácil de identificar gracias a su cabello rosado.

Llego hasta una puerta y abrió, la sala de ensello se encontraba vacía, le habían avisado que hoy asistiría con un gran grupo de personas. Al ver que efectivamente estaba sola, comenzó a estirar mientras que en sus audífonos sonaba una suave música de Jazz.

Comenzó a bailar sin nadie, pues aún era temprano para que llegaran las otras personas, cerró sus ojos y se dejó llevar por la tranquila música. Estuvo varios minutos bailando con los ojos cerrados, estaba al final de la tercera melodía, cuando decidió abrir sus ojos, sorprendiendose al ver el reflejo de un chico a sus espaldas. Giró rápidamente y algo torpe dio una inclinación de saludo.

- Lo siento, no quería asustarte - Se disculpó el joven, dando también una reverencia - Eres la trainer nueva, de Japón ¿cierto? - Sakura asintió con una sonrisa y se presentó.

- Haruno Sakura, un placer

- Chan Christopher bang - Le dio una sonrisa simpática - También es un placer. - el silencio reinó unos segundos hasta que la puerta se abrió dejando ver a más personas y algunas de las chicas que compartía dormitorio con Sakura.

La sala estuvo ocupada durante un buen rato, cuando salió de ahí, recorrió los pasillos de la empresa en silencio, si bien era una persona bastante simpática, a veces solo le gustaba estar en silencio. Sintió un par de vibraciones a sus espaldas, ya que al seguir con sus audífonos no escuchaba nada, giró un poco para reconocer como el mismo chico de antes la alcanzaba trotando. Freno y paró la música en el momento en el que estuvo frente a ella.

- ¿Te incomodaria si caminamos un rato juntos? Para conocernos mejor, no es muy lindo ser el nuevo y no conocer a nadie - Sakura le sonrió y asintió.

La caminata comenzó primeramente en silencio, Sakura estaba cómoda pero en cambio Christopher estaba buscando un tema de conversación o al menos alguna pregunta por la cual no sienta que la estaba invadiendo mucho.

- Pregunta lo que quieras - dijo Sakura de repente como si le hubiera leído la mente - Si me llegara a molestar o inquietar alguna pregunta, te lo haré saber ¿Bien? - Chan se puso tímido y sonrió mientras asentía.

- ¿Tienes hermanos? - se atrevió a preguntar.

- Sí, dos más, soy la menor y ¿tú? - Chan le sostuvo la puerta de salida y se adentraron a las calles de Seúl.

- Soy el mayor, tengo una hermana y un hermano menores a mi. Me llevo bien con ellos, ¿tu relación con tu familia es buena? - Sakura miró al rededor se quedó en silencio varios segundos

- Solo con uno de mis hermanos. -Respondio mirando hacia el cielo  

-  ¿Quieres comer? Yo invito- Sakura lo miro unos momentos y asintió. - Genial, conozco un lugar muy bueno. ¿De qué año eres?

- Del 98

- Soy un año mayor, soy del 97 - Chan sonrió y dobló en la esquina.

- Ni creas que te diré oppa, a lo sumo te diré Chris-San, Bang-San o Chan-San - Sakura río

- Acepto el Chan-san - cruzaron la calle, hasta llegar a un local de comida, estaba medianamente lleno. - Es aquí, la comida es muy buena... Sabes, tengo una curiosidad muy grande

- Dime - dijo cuando se sentaron

- ¿Tu cabello es natural? - Sakura largó una carcajada sincera. Chris la miró un brillo único en sus ojos.

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