Idol cerezo

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Sakura se estaba cansando un poco de que Dylan sea tan "detallista" con ella, era bastante pesado para su opinión, pensó que le había dejado claro cuando le aclaro que saldrían como amigos en el debido caso que salieran.

En estos momentos estaba en su estudio, Dylan le había traído el almuerzo, el cual estaba muy insistente en que comiera, pero sus insistencias cesaron en el momento de la llegada de Minjoon, el bailarín comenzó a contarle  cosas de su vida que obviamente ella nunca le preguntó. El mayor los miraba de vez en cuando, pensando si debía intervenir en cuando notó la vena punzante en la frente de la pelirosa.

- Y así fue como me hice la cicatriz en la pierna de chico, también recuerdo cuando...

- Puedes callarte? - Sakura giró su cabeza - Estoy intentando trabajar, y estas distrayendo me, en más, te voy a pedir por favor que te vayas de mi estudio, apareciste con la excusa de traerme el almuerzo el cual agradezco, pero ahora vete. - Dylan asintió.

- Lo siento, tienes razón, ¿te veo en la sala de prácticas?

- No, hoy no estaré, Minjoonie ocupara mi lugar. - Asintio de nuevo y salió por la puerta, ambos estuvieron en silencio unos cuantos minutos. - Fíjate si se fue, por favor - El mayor se levantó y miró para ambos lados del pasillo.

- Se fue, creí en un momento que te ibas a levantar e irte sin decir nada.

- Lo pensaba, pero tal vez me hubiera seguido, además tengo que trabajar. - Volvió a su lugar mientras hacía unas cosas en su móvil.

- Como estas con Taehyungssi?

- Muy bien, nuestra relación no ha cambiado mucho, tenemos poco tiempo de vernos, pero el siempre hace lo posible para verme aunque sea cinco minutos, es lindo.

- Me alegra verte bien, es un buen chico. Por cierto, que lindo lo que tienes en el cabello.

- Es un Kanzashi, taetae me lo regaló.

- Es bonito, me gusta la flor, te dejaré trabajar, iré con los muchachos, ¿Puedo hacerlos sufrir? - Sakura negó. - Solo a Dylan?

- A ninguno, ahora ve, y si ves a mi hermano, dile que cenaremos juntos.

- Como ordene la tirana! - mencionó antes de salir corriendo por la puerta.

Sakura se quedó sola, comenzó a trabajar en una canción nueva que se le había ocurrido en un sueño. 

Dos horas después, dejó todo, su cabeza había comenzado a dolerle, sus dolores habían vuelto a ser recurrentes, supuso que era por el nivel de estrés que estaba manejando de nuevo, más el nuevo bailarín, que parecía tener una extraña obsesión con ella.

Dejo de pensar un poco y se dispuso a comer lo que le había traído, mientras le mandaba un mensaje a su pareja, cuando probó el tercer bocado, sintió un sabor extraño, lo miró unos momentos con extraña confusión, removió un poco la comida con los palillos, se acercó un poco a la nariz para poder olerlos y fue cuando su vista comenzó a nublarse, se sentía mareada, tiró los palillos y  tomó como pudo el móvil y buscó entre sus contactos, casi no podía distinguir, pero logró llamar.

- Cerezo? Es raro que me llames. ¿Que sucedió?

- Ven rápido por favor, estoy en mi estudio. - Su respiración se volvió irregular, siendo escuchada por la otra persona.

- Estas teniendo un ataque?

- No, no sé, por favor, ven lo más rápido que puedas, creo que necesito ir al medi..- La llamada se terminó al momento que Sakura se dejó caer al suelo, sintiendo con su mejilla el piso templado, su celular quedó a unos metros de ella.