III. ( the arrogant house of black )

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( the arrogant house of black )chapter number three

A simple vista la casa de los Black parecía pertenecer a una familia con más dinero que la de los Yaxley

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A simple vista la casa de los Black parecía pertenecer a una familia con más dinero que la de los Yaxley. Era enorme con ventanas largas y techos altos, habían tantas puertas como ventanas y tantos cuadros como floreros y un enorme espejo en la entrada, preciso para ver lo perfecta que se veía.

Traía puesto un moderno vestido negro de la colección de 1967 que había comprado su madre en Paris, mas ahora traía ella puesto. Había elegido una pieza algo atrevida para la situación, pues esperaba ver a las Black con sus vestidos largos hasta lo más arriba del cuello, en cambio ese vestido se abrazaba a ella y a cada una de sus curvas. Había respetado la petición de su madre de usar un vestido negro, uno que dejaba en descubierto sus hombros por excepción de la fina tira del vestido y que tenía un final asimétrico, sin llegar a ser demasiado alto, de hecho, aunque un lado dejaba ver un poco más arriba de su pierna, ni siquiera llegaba a la rodilla, sobre ese vestido un costoso abrigo italiano largo de cuero que con la correa marcaba bien su figura.

Mallory era hermosa ¿lo mejor? Lo sabía, estaba consiente de su belleza y de lo bien que se sentía cuando más le sacaba provecho. La verdad era que se sentía como un animalillo asustado entre tantas personas que la veían como uno, sin embargo el verse hermosa le hacía sentirse aún más segura y poderosa de lo que usualmente se sentía.

La pelirroja deslizó el abrigo por sus brazos dándoselo a uno de lo elfos domésticos. Traía unos guantes negros que llegaban por sobre sus codos pues de hecho, amaba los guantes largos. Su cabello largo y rojizo le hizo sentir un pequeño cosquilleo por su clavícula junto a la fría brisa siempre presente en aquella casa.

No recordaba bien cuando había sido la última vez que había estado esa enorme y oscura casa, sin embargo estaba segura que en su momento se había prometido no volver. Era tan grande que le hacía sentir como si estuviera en la calle.

-¡Las Yaxley! -exclamó un hombre algo robusto y de pelo canoso, abrazó a su madre para después verla de pies a cabeza- Con que esta es Mallory Yaxley, vaya que mi hijo se ha sacado la lotería.

Entonces de pronto, recordó que no sabía ni con cual de ambos se casaría, quiso preguntar pero estaba demasiado avergonzada para ello. Así que ese era Orion Black, el padre de ambos y primo de Walburga Black.

Observó uno de los cuadros en los que se veía a la familia, dándose cuenta que Regulus era la copia exacta de su madre y Sirius la de su padre, viendo así a la tan sonada Aludra, tenía un rostro escalofriante pero era muy bonita, si es que Regulus se parecía a Walburga, ella era su copia exacta, igual de extravagantes. Pasó sus dedos por el marco del cuadro sintiendo curiosidad por lo que le esperaba el futuro y por que aunque ya era seguro, seguía sin sentirse como si de hecho ya estuviera comprometida.

Pasaron a un enorme comedor en el que ya estaban sentadas Bellatrix y Narcissa Black junto a sus esposo y los padres de ambas, Cygnus y Druella. Habían estado recientemente en el ojo de la tormenta tras el nacimiento de su primera nieta la cual era una mestiza, algo contradictorio con su famoso dicho; "Siempre puros".

SEMPITERNAL # sirius blackOnde histórias criam vida. Descubra agora