XLVII. ( the lupin house )

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Lily, Dorcas y Marlene corrieron hacia ella y abrazarla. Había pasado un poco más de una semana desde la última vez que las había visto, pero en Hogwarts se veían todos los días así que se sentía más la diferencia. Esa era probablemente la primera salida en grupo que hacia sin Salvatore o Marie. El slytherin estaba bien, aún mejorándose y sin ser un hombre lobo, es decir en la luna llena que recién iba pasando, se había encontrado inquieto, su cuerpo le había picado y tenía un antojo particular por la carne, pero eso había sido todo. Remus lo había ido a visitar y habían conversado por varias horas en privado, lo que la dejaba más curiosa.

Ese día en particular visitarían a Remus, pues se mudaría y según James, lo menos que podían hacer por Lyall y Hope Lupin era ayudarlos. Sirius insistía en irse de su casa siquiera por unas horas, y de no ser por esa carta en particular de aquella chica con la que el promiscuo gryffindor había estado anteriormente involucrado, no se hubiera decidido por ir. Para no levantar sospechas, habían llevado con ellos a Regulus, que había aceptado a ir probablemente solo porque Mallory se lo había pedido, ya que no estaba muy cómodo con la idea de salir con Sirius sin Aludra de por medio, pues por alguna razón, aunque Mallory le había insistido, ella no había querido ir, ni tampoco hablar sobre que pasaba con Remus. Solo había dicho que iría donde Salvatore y tal vez luego los visitaría, pero no lo veía probable.

—¿Aludra no quiso venir? —preguntó Lily agarrándose de su brazo, ella solo negó ignorando un punzón en su cabeza tan rápido como repentino.

—Esta donde Salvatore, les manda saludos a todos —informó a lo que las chicas sonrieron, Salvatore siempre se llevaba bien con las chicas, más que con los chicos—. La verdad es que —miró de reojo para ver a Sirius conversar con James y Peter— estoy aquí más de niñera.

—¿De que hablas entre susurros? Quiero saber —dijo seriamente Regulus asomando su cabeza por encima de la de Lily al ser bastante alto y ella baja—. Me has traído aquí, Mallory. Dime que está pasando o me aburriré e iré.

Regulus no sabía exactamente su relación con Sirius, pero sabía al menos que no eran solo amigos o comprometidos, no sabía demasiado pero sí suficiente. Lily lo acercó más para que Mallory no tuviera que hablar demasiado alto y comenzó a confesar.

—Hace poco una chica le escribió a Sirius, una tal Stacy —rodó los ojos—. Dijo que quería regresar con Sirius y que eran vecinos.

—¿Él que le dijo? —preguntó el pelinegro conmocionado agarrándose del brazo de Lily sin siquiera notarlo.

—Que lo dejara en paz.

—La mandó a la mierda, como debe ser —apoyó Marlene a lo que Dorcas solo rió—. La conocimos dos veranos atrás, es una chica un poco rara. Trataba mal a todos, incluso al mismo Remus menos a Lily y Sirius. Se lo cogió pero ya es pasado.

—Solo es una chica insegura, no te preocupes por nada —la calmó Lily para mirar de reojo a Regulus.

—Eres la mejor mujer que mi hermano o cualquier hombre puede tener en esta vida, Mallory. Literalmente si es que Sirius decide volver con esa muggle de quinta, es él quien pierde. Eres linda, inteligente y tu apellido esta en todos lados, tienes más dinero que Potter y nosotros juntos —la calmó Regulus y eso sonó más lindo de lo que esperaba.

—No creo que haga nada, lo veo más tranquilo que nunca como una persona que tardó un año en considerarlo un amigo —agregó Dorcas—. A veces parece que son coquetos pero solamente son amables, la coquetería se les queda al hablar. Salgo con una Sirius Black —señaló con la mirada a la rubia que rápidamente se ofendió.

La casa de los Lupin no era demasiado grande, en general el barrio era algo pobre, no peligroso pero tampoco lujoso. Vivían numerosos muggles y salían los niños a jugar con una pelota lo que según parecía ser de acuerdo a la explicación de Lily, era el quidditch de los muggles. Tocaron un par de veces y una señora algo mayor abrió la puerta, tenía una mirada apagada pero una gran sonrisa para abrazar a James y luego a Sirius y Peter.

SEMPITERNAL # sirius blackWhere stories live. Discover now