SEMPITERNAL # sirius black

XIX. （ black birthday ）

Ahora que al parecer las chicas gryffindor las tomaban a Aludra y ella parte de su grupo al igual que ha Dorcas, las habían invitado al que sería el cumpleños de los mellizos Black, unos días antes de este. Mallory al comienzo se sentía con pocas o nulas ganas de ir, había comenzado a evitarlo y había logrado pasar lo que quedaba de semana sin verlo.

Sin embargo su madre había mandado una carta detallada con las razones por las que debía presentarse a la informal festividad de los gryffindor, así que se atrevió y lo hizo, se puso un simple abrigo color verde sobre un pantalón negro básico al igual que una blusa del mismo color y diseño y se presentó al lado de Aludra Black, Dorcas Meadowes, Regulus Black y Pandora Rosier un año menores que ellos, Salvatore Nott quien estaba como el orgulloso novio de Aludra, y por supuesto porqué no, su ahora gran amigo Callahan Parkinson como acompañante, quien había accedido a ir aunque no había sido invitado.

Sabía que Parkinson no era de las personas en las que uno debía de confiar, al igual que con Sirius Black, sin embargo era un chico con estilo, más caballeroso e interesante que el mismo Sirius, si ya se había aprendido a relacionar con personas como él, entonces por qué no con Callahan, quien estaba obviamente interesado en ella, probablemente solo para molestar a Sirius, pero ella también quería molestarlo así que dejaba que se acercara un poco más y que tocara su cabello de vez en cuando, solo cuando se encontraba de un humor que le permitía soportarlo.

—Me sorprende que me hayas traído aquí contigo, al igual de que te hayas soltado en cabello, debo de suponer que te emociona el que te vean conmigo —ella solo bufó—. Vamos, ya se que lo haces para hacer que se moleste después de lo que te conté, lo cual me parece bastante rudo, no te importa si es que dañas sus sentimientos o si es que malinterpreta las cosas ya que al parecer soy solo una fachada.

—¿Desde cuando te importan los sentimientos de Black? Dañaría sus sentimientos si es que los tuviera por mí, y estoy segura de que no los tiene, además dañó mi honor al ser un promiscuo de mierda así que tengo todo el derecho de hacer lo que se me da la gana, y si te quedas callado un poco más de tiempo puede que te de una oportunidad.

—No se porqué, si es que eres una mujer tan segura de si misma y consiente de lo que es capaz, se te hace tan complicado creer que de hecho le gustas a alguien —rodó los ojos, a lo que Callahan rió—. Pero entiendo que no creas que le gustas a Sirius Black, después de todo siempre ha sido un casanova ridículo.

—Exactamente como tú —defendió aunque no sabía porqué.

—Casanova, sí —aceptó con la cabeza—. Pero ridículo jamás, linda —le guiñó el ojo, al menos tenía seguridad, sin embargo el que le guiñara el ojo no llegaba a ponerla tan nerviosa como cuando el gryffindor lo hacía—. Si es que vas a dejar que un casanova te rompa el corazón, mejor que sea un casanova inteligente, maduro y además bastante atento y detallista.

—Nadie rompe mi corazón —se burló para mirar a otro lado—. De todas formas ¿por qué dejaría que alguien lo haga? Seas tu o Black. Yo vivo para mi misma y conmigo misma, soy lo único que me importa por más que pueda sonar narcisista o arrogante, si yo no veo por mí misma, nadie lo hará. Mi madre me comprometió con un ignorante, mi tío nadie sabe donde está, no tengo hermanos, mi padre está muerto, mis abuelos también, estoy sola. Solo me tengo a mí y al dinero. La vida de los puristas supersticiosos es de hecho bastante solitaria.

—¿Eres una purista supersticiosa? Si es que eres una buena amiga de una sangre sucia.

—La verdad es que a mí el tema de la sangre siempre me tendrá sin cuidado, no me importa. Siento que hay cosas más grandes por las que debo de preocuparme, no soy tan superficial como en la sociedad en la que vivo. Solo me importa mi dinero, como hacer que se duplique y como no morir en el intento.