¡YAXLEY Y BLACK SE ODIAN Y
ESTAN OBLIGADOS A CASARSE!
━━━Mallory Yaxley le hacía honor a su nombre, era sin duda una chica desafortunada, había perdido a su padre a una corta edad y ahora su madre parecía seguir su camino, por lo que dejar a su hija...
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SIRIUS ORION BLACK ESTABA TENIENDO UNA CRISIS y la causante de ello no era su melliza apareciéndose de pronto en hogwarts y siendo clasificada en slytherin, sino que era su matrimonio arreglado con la única chica de la que estaba seguro que no caería a sus encantos, esa era aquella pelirroja slytherin tan peligrosa como una serpiente.
Durante sus años en Hogwarts había aprendido mucho, distintas técnicas o formas de molestar a la gente. Jamás había tenido nada en contra de Mallory Yaxley sin embargo estaba muy seguro que ella lo creía desde que aquella broma que había tenido como victima colateral a su cabello, y todo hogwarts sabía que uno se podía meter con todo, menos con el cabello de Mallory Yaxley.
Por lo general era un chico muy distraído, mas estaba cien porciento seguro que a partir de ese momento se había vuelta la presa de aquella chica, pues siempre que lo atrapaban estaba ella entre los tantos que se unían en su contra. Seguramente también se debía a que en alguna ocasión le había coqueteado, lo que había sido un disgusto total para aquella narcisista.
Para Sirius, Mallory era un dolor de cabeza. Él era un chico bastante arrogante y seguro de si mismo, estaba bastante consiente de ello, sabía que no le agradaba a muchos pues naturalmente podían sentirse intimidados por su belleza, mas estaba seguro de que no sonaba ni lo mitad de insoportable que la slytherin.
Era demasiado vanidosa, tanto que estaba seguro que se detenía siempre a mirarse a un espejo, no se molestaba en disimular su desagrado o en intentar siquiera un poco sensible o amable, de hecho era todo lo contrario, era firme y directa, tanto que rompía el corazón de muchos sin siquiera saberlo.
Todos sabían que ella tenía mucho dinero, además que era inteligente y debía de admitirlo, era bastante bonita, pero eso no significaba nada, era engreída, caprichosa y demasiado materialista, una crianza digna de un matrimonio como el de sus padres, una joven de veinte y un hombre de cincuenta.
Por un largo tiempo había sido en broma comparado por sus amigos con ella, ambos atractivos, adinerados y bastante caprichosos según James o Remus.
"Todo por excepción de lo inteligente y aplicado" en su momento había molestado su licántropo amigo, sin embargo más que una broma para él siempre había sido una ofensa ser comparado con tal ser tan superficial y arrogante, ni siquiera él se atrevía a tanto, aún así había esperado límites de Mallory Yaxley hasta que lo vió, en la mejor ropa que tenía bajo su parecer e hizo como si no lo conociera, eso no solo había logrado que su odio se volviera personal, sino que había tocado su orgullo, aún peor cuando en aquella cena se había negado tan descaradamente al saber que era él la persona con la que se casaría.
-No entiendo. ¿Por qué te están obligando a casarte con una pelirroja, inteligente y millonaria, piernas largas slytherin? Técnicamente eso es lo más lindo que tu madre ha podido hacer por ti -opinó su amigo de lentes, a lo que Sirius solo se sintió indignado.
