XXXI. ( multiple children )

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No solía ser mucho de ese tipo de personas que se detenían a filosofar demasiado sobre demasiado, pero había comenzado a hacerlo tras su conversación con Sirius, el significado de esta conversación, sus propios sentimientos y el evidente hecho de que le gustaba, lo aceptaba solo que seguía sin saber si debía de decírselo o no. Habían estado discutiendo y había sido precisamente por esas mismas discusiones que se había dado cuenta que le gustaba más d elo que se había planteado. Ahora se la pasaba celosa y el que él lo estuviera la reconfortaba, pero después de todo, ¿era lo mejor decírselo? ¿De que iba a cambiar de todas formas todo? SeguiránMarie le   en problemas probablemente y podía ser que todo fuera un caos, así como también había la posibilidad de mandar a la mierda la predicción de Aludra, y era esa posibilidad lo que la mantenía pensativa escondida entre sus pensamientos y distraía en todo momento.

Se sentiría mejor con ella misma e incluso podía comenzar una relación con él, pero tras todo eso, dudaba seguir gustandole a Sirius, en especial porque seguía viéndolo cerca de Penelope. Era un poco obvio que ya no con la misma confianza, pero si sabía que no le ponía cómoda, debía de haberle puesto más límites, así como ella había hecho con Kit luego de ponerse en el lugar de Sirius quien se había comenzado a sentir afectado con sus interacciones con Regulus, quien no le había contado hasta ese momento que si el compromiso cambiara de un Black —hijo de Orion y Walburga Black— a otro, no pasaba absolutamente nada y que de hecho se había comenzado a considerar tras su mala relación y debido a que su madre aparentemente lo había pedido con toda intención de que ella se sintiera mejor con esa situación.

Marie le había recomendado hablar con él, dejar las cosas en paz, armas mejor su amistad nuevamente y una vez que viera que las cosas iban en paz, comenzar a salir con él, confesarle que le gustaba y que no planeaba cambiar el compromiso de un Black a otro, mas el hecho de hablarle resultaba aún más complicado, pues por primera vez no sabía que decir. Había pasado ya algunos días tras lo del anillo y hasta ese momento no se lo había devuelto, y tras reconsiderarlo muchas veces, había decidido usar eso de excusa y acercarse a él para pedírselo, y además demostrar que si le importaba además de tener una excusa de hablarle.

—Ya esta —se levantó de su cama—. Dorcas nos invitó a jugar cartas con ellos, así que allí aprovecharé.

—¿Lo harás ahora? —preguntó Marie quien saltó de su cama junto a Aludra quien estaba emocionada. Abrió la puerta para ver a Salvatore y Regulus con dos camisetas iguales y lentes de sol en la cabeza junto a botanas en sus manos, aparentemente escuchando todo.

—Quiero ir —dijo Salvatore con comida en su boca.

—Yo igual, para alcarar que apoyo su matrimonio y eso —corroboró Regulus.

—Reggie va —insistió Salvatore—. Él compró las botanas.

Mallory rodó los ojos para asentir, dirigiéndose con sus amigos a la sala común de gryffindor en la que solo estaban las chicas. Penelope y Dorcas los recibieron amablemente al igual que Marlene quien se sentó al lado de Salvatore y Regulus para comer de las bolsas que tenían los dos slytherin. Ella no quería ser muy directa y decir abiertamente que quería hablar con Sirius, por lo que comenzó a jugar mientras esperaba que él se apareciera.

—¡Mallory! —exclamó Peter, no tenía buenos recuerdos con ese chico— Estás aquí, eh... ¿Sirius sabe de esto? —ella negó con la cabeza—. Le diré para que nos unamos, ¿podemos?

—Mejor, mientras más mejor, todos contra Aludra para ganarle —le dijo Lily sonriente.

Cuando Peter se fué, Mallory acomodó su cabello rápidamente, sintiéndose increíblemente nerviosa, para actuar con indiferencia y seguir jugando. Sintió rápidas pisadas junto a un salto solo para ver a Remus saltar junto a James que bajaba más tranquilo al lado de Peter, todos menos Sirius.

SEMPITERNAL # sirius blackWhere stories live. Discover now