The Villain that Reincarnated into the World of a BL Game goes Astray

Capítulo 63: El enfrentamiento final

Cuando me bajé del carruaje, estaba en un espacio abierto en medio del bosque. A mi alrededor, no había nadie de la flota de esos carruajes en carabana, únicamente se encontraba en el lugar el carruaje del que me acababa de bajar. Con la capucha puesta, barrí con la mirada toda la zona.

Oí pasos apresurados en la hierba. Del bosque aparecieron bastantes hombres. Tal vez más de diez en total. Todos iban armados.

"Sólo por mí, seguro que están exagerando. El Príncipe Alfred ni siquiera está aquí. Bueno, debe estar agobiado en el Palacio Real, supongo". Mientras hablaba solo, un hombre de mediana edad salió del centro.

He visto a este hombre antes. Si no me equivoco... ¿es el Marqués Meissit? Para decir que es un marqués, ya se retiró; así que, un ex marqués.

"Nunca pensé que saldrías descaradamente."

"¿Qué quieres hacer llamándome aquí?"

"Por supuesto, para que te vayas a donde no puedas encontrarte con el Príncipe Alfred."

"Estaba en camino para ir de viaje, ¿es esto algo que debes hacer para incluso obstaculizar eso?"

"Incluso si te vas de viaje, será problemático si regresas. Para evitar todos los problemas, es mejor que te vayas a algún lugar lejano del que nunca puedas regresar." Meissit se burló.

En realidad no era una mala persona, así que me sentí un poco arrepentido.

"¿No crees que ya es suficiente? Sólo reconoce a Fania como la esposa del Príncipe Alfred, ¿no? Sabes que más gente del Segundo Príncipe se inclina por aceptar a Fania, ¿verdad? Si sólo ves lo obsesivo que es el Príncipe Alfred hacia Fania, no hay otra manera."

"¡Cállate! ¡Cómo vamos a aceptar a un esposo varón! Finalmente la posesión del Príncipe Alfred como príncipe heredero ha sido decidida. Si tiene un cónyuge varón, ¿cómo habrá descendencia entonces? ¿Quieres acabar con la sangre real?"

"¿Cómo? Está el príncipe Andrew, o incluso el tercer príncipe, el príncipe Ernest, o el cuarto príncipe, el príncipe Ailly. La sangre real no terminará tan fácilmente, y lo sabes".

Su Majestad, que tenía a su princesa consorte junto con otras consortes laterales, fue bendecido con muchos hijos: cuatro príncipes y seis princesas. Entre ellos, el primer príncipe, el príncipe Andrew y el segundo príncipe, el príncipe Alfred ambos tenían madres con fuertes influencias políticas. Pero aún así, aparte de ellos, Su Majestad todavía tenía muchos hijos consanguíneos.

"¡Son diferentes! Sólo el Príncipe Alfred es la familia real adecuada. ¡Nadie más que los hijos del Príncipe Alfred pueden continuar la familia real!" Los ojos de Meissit se abrieron de par en par, su cara parecía estar poseída.

Esta gente afirmaba que todo era por el bien del Príncipe Alfred, pero al final, eran criados que idolatraban demasiado a Su Majestad. Después de todo, el Príncipe Alfred era una copia viviente de Su Majestad. Se pusieron del lado del Príncipe Alfred sólo porque se parecía totalmente al yo más joven de Su Majestad. Tenían la ilusión de que el Príncipe Alfred era Su Majestad cuando era joven. Por lo tanto, sólo reconocieron a los hijos del Príncipe Alfred (léase el capitulo donde narra su Majestad) como el próximo rey. Por lo tanto, en su creencia, era imperativo que el Príncipe Alfred tuviera hijos, por lo que un cónyuge varón era un no total.

A estas personas de la facción del segundo príncipe que fueron denominadas exponentes de la eliminación de Fania no les importaban en absoluto los ascensos ni sus propias posiciones. Simplemente adoraban demasiado a Su Majestad; eran leales criados que nunca traicionarían a Su Majestad. Para que un rey dirigiera su país, era imprescindible poseer algún tipo de carisma. Sin embargo, Su Majestad era demasiado magnético. Llevó a sus seguidores a encapricharse tanto con él que se volvieron retorcidos.