Seres de la Oscuridad SDLO [VampireAndWolf]

Capitulo 3

- Señorita Mitsuki, por favor levántese - escuche la voz de una mujer.- Ya ha anochecido y le he abierto las ventanas.

Tras abrir el cajón veo a una muchacha que aparenta mi edad física, tiene rasgos delicados que se muestran con todo detalle gracias a que sujeta su cabello con un listón.

Nueva sirvienta.

- Veo que ya sabes quién soy - la chica asiente.- Entonces no hay necesidad de presentarme - la muchacha baja la cabeza algo apenada.- ¿Y tú quieren eres? ¿Sabes que ocurrirá si te quedas en esta casa?

- Si, Señorita. Pero he decido servirle a ustedes por propia voluntad - comento mientras se quitaba parte de su ropa y dejaba al descubierto su cuello.- Así que si lo desea, puede alimentarse de mi ahora mismo.

Por unos segundos no digo nada, ¿Y qué podría decir? Si ante mi tengo a alguien que de verdad quiere morir.

¿Ella desea servirnos? ¿Qué tonterías está diciendo? Si ella desea volverse de nuestra raza está muy equivocada.

Acercándome a su cuello, decido tocar aquella suave piel, puedo ver como los colmillos de mi tío ya la han tocado ¿Hipnosis? No lo creo. Por lo que puedo ver ella mismo dejo que la mordieran, solo me limite a tocarla con mi lengua y luego me aleje.

En respuesta, ella me miró sorprendida, ¿No esperaba que la rechazara, eh?

- Lo siento, pero por esta noche te necesito. Así que si deseas que alguien te entierre los colmillos dile a mi tío, a mí no me interesa complacerte.

La chica solo pudo tocarse el cuello en la zona donde no había ninguna herida y luego, haciendo reverencia, se retiró.

Al bajar a la sala pude ver que varios invitados aún no se iban y en pleno pasillo disfrutaban la sangre de nuestras criadas, entre ella se encontraba la que me había alimentado la noche anterior, estaba en los brazos de un hombre mayor que la estaba mordiendo tan fuerte que se notaba la fuerza con que enterraba sus colmillos en su frágil piel.

Solo me basto con mirarla un segundo para ver que estaba llena de mordidas, en los brazos, el cuello, las piernas, incluso tenía en la mejilla izquierda.

Me sorprendía el hecho que aún estaba con vida, aunque viendo su rostro se entendía que no estaba consciente de nada. Todo su rostro estaba sonrojado, respiraba de una manera muy agitada y todo su cuerpo se retorcía cuando unos dientes la mordían, prácticamente solo podía sentir el placer de ser mordida.

El hombre no se inmuto en mirarme y continuo bebiendo de su sangre, yo solo observaba como poco a poco su pulso y su vitalidad iba descendiendo hasta desvanecerse.

Solo cuando el hombre por fin la dejo en el piso, moribunda y a punto de morir, me acerque.

Ella me reconoció de inmediato porque logro susurrar mi nombre, compadeciéndome de ella decidí recostarla en mis piernas y acunarla hasta que la muerte se la llevara.

Si hay algo que no me gusta es que las personas mueran solas, todos les tienen miedo a la muerte, incluso los más fuertes.

Morir sin nadie alrededor es algo que siempre se debe llorar, es mejor morir con alguien al lado (aun si no es nada de esa persona) que morir solo ¿Verdad?

Estuve prácticamente media hora con ella, acariciando su cabello mientras los gritos de las criadas restantes daban por finalizada el festín que se había celebrado ese dia.

Cuando todos los invitados se fueron, una a una me lleve a las difuntas criadas al patio para enterrarlas, en total murieron unas sesenta mujeres.... Sesenta mujeres que estuvieron a merced de unos ¿7, 8 hombres como mínimo?