Capítulo 34.2

218 21 8
                                    

Pov Okami

Su grito me despertó.

Habia dejado a Miyuki disfrutar de la playa, estaba tan cansado que ni siquiera note cuando me había quedado dormido, lo ultimo que había visto era a esa vampira disfrutar de la marea de la mejor forma: Siendo arrastrada. La vi tantas veces caer a la arena porque se quedaba donde las olas rompían que no me preocupe en lo absoluto, de hecho me divertía ver ese lado de ella.

Cuando la vi en ese Bikini casi me lanzo encima de ella, apenas y contuve las ganas de aullar. No pude evitar mirar su físico, he luchado desde niño con los vampiros pero por lo general ninguno tenia grandes "cualidades" naturales, de hecho, antes de conocer a Miyuki pensaba que todas las vampiras eran planas... gran error, ver a Miyuki me elevo el pulso.

No soy un chico muy lujurioso, he tenido mis momentos de sexo con alguna que otra loba. Hasta con Reika he tenido mis escapadas de noche, pero es por el gen mas que nada. Cada cierto tiempo los lobos entramos en una frenesí y deseamos el sexo (sobre todo las damas) algo horrible es cuando están en celo... la mayoría se vuelve loco, por suerte en esos momentos yo me mantengo en misiones o muchas de la manada se tirarían encima de mi.

Al momento que ella comenzó a hablar ya estaba devorándola con mi mirada, gracias a dios dio el comentario necesario para que saliera del trance. Quizás ella no lo sabia pero nosotros los hombres lobos al excitarnos podemos perder el control y nuestro lado animal puede salir... lo que no seria muy grato para ninguno.

Ahora estaba desesperado buscándola ¡NO LA VEÍA POR NINGÚN LADO!

- ¡Allá esta!

Grito Hakuro, señalando una tienda.

Joder. Ahora entiendo porque grito.

A pocos metros de nosotros había una tienda que estaba siendo rodeada rápidamente de gente, no podía ver que estaba ocurriendo pero sabiendo que era de día suponía que nuestra vampira estaba asándose.

No tuve piedad con nadie, en cuanto corrí hacia ellos empuje a todo imbécil que se acercaba a verla. Cuando por fin llegue a ella me devasto su cuerpo, estaba cubierta por toallas casi por completo, pero al estar retorciéndose por el dolor las había lo suficiente para que comenzara a caerse y dejara al descubierto mas piel.

De un momento a otro dejo de gritar y de moverse, estaba inconsciente. Hakuro y Daichi se encargaron de empujar a todo estúpido curioso que se acercara, yo sigilosamente me acerque a ella y la cubri con las toallas mas grande. Debía llevarla de nuevo al Hotel, cubrir todas las ventanas y traerle algo de sangre... el problema es que no tenemos donantes o mujeres dispuestas en este momento.

Tampoco puedo usar a Hakuro, aunque descanso lo suficiente y esta curada no puedo permitir que se ofrezca mas. Miyuki ya la ha mordido demasiadas veces, tampoco quiero que se acostumbra o se repetirá lo de hace años... Un Fukuda no debe volverse adicto a la sangre de los lobos, las probabilidades que asesine aumentan y no hay forma de prevenirlo.

Mierda, esto va a ser difícil.

Dejando de lado el drama que tenia en mi cabeza por el suministro para Miyuki, con mucho cuidado de que no despierte paso mis brazos por debajo de su cuerpo, apoyando su cabeza en mi pecho, rodeando sus piernas con uno de mis brazos. Cargarla fue mucho mas doloroso para ella que para mi, pero cuando toque sus quemaduras me estremecí, aquella sensación no me gustaba, su piel se veía tan suave y delicada que verla toda quemada y humeada era algo repugnante, trate de no moverla mucho mientras me acercaba a mi hermano.

- Daichi controla a las personas, revisa que ninguno tenga grabado en vídeo lo que paso - Si alguien lo hizo estamos en serios problemas. Él solo asintió y luego me señaló a Miyuki. - La llevo de vuelta al Hotel, esta demasiado... expuesta - quemada. - perdió la consciencia pero no quiero arriesgarme a que despierte.

Seres de la Oscuridad SDLO [VampireAndWolf]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora