CAPÍTULO 8.-tercer fragmento

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✽✿✽



—Quería hablar contigo.

—¿De qué?

—Es .. es sobre Evangeline.

Oh cierto, la mate de mi hermano, la dulce niña.

—¿Qué hay con ella? —le dije.

—No soy el único que piensa que no es normal que sienta esto por una niña ¿verdad? —me dice el muy afligido.

—No, yo también creo que es muy raro todo esto.

—¿Sabes cuántos años tiene? ¡11 años!, por Dios, soy un degenerado.

—No eres un degenerado —le dije burlándome de él—. Sí, es una niña, pero crecerá. Además, solo son 7 años. Hay parejas que se diferencian por muchos más años.

Como yo y Oliver

—Sí, lo soy. Además, esto no es normal. Cuando la vi, mi supuesto "lobo" empezó a gritar mate como loco, mi cuerpo empezó a temblar, quería marcarla ahí mismo.

—¡¿Marcarla?! ¡¿Ahí mismo en frente de todos?! —dije aterrada.

—Sí.

—¡Sí, eres un degenerado!, ¡¿cómo querías tener relaciones íntimas y en frente de todos?!

—¿De qué mierda hablas? Idiota, marcarla es morderla en el cuello para que otro lobo no se acerque a ella. No sé qué mierda soy, ¿un hombre lobo o un vampiro?

—¿Morderla? —Oliver quería morderme. ¿Qué carajos?

—Sí, morderla. Me puedes decir, ¿cómo llegaste a la conclusión que marcarla es tener relaciones? Maldita pervertida.

—Es cosa de chicas —no tenía idea que cosa responderle.

—Bueno, volviendo al tema, todo el día he pensado en ella: cómo esta, qué está siendo, qué piensa de mí, si me tiene miedo, si tiene hambre, si está triste, si está feliz, si tiene algún problema, si....

—Ok, ok. Ya entendí el punto —dije interrumpiendolo.

—Cuando Oliver le ordenó que se fuera con su hermana de forma autoritaria, lo quería matar, pero me calme —dijo un poco enfadado.

—Creo que deberías pasar más tiempo con ella.

—¿Estás loca? Mi vínculo con ella crecería y eso sería peor cuando le diga que no seré su pareja.

—¿En serio harás eso? le dije algo preocupada. Pobre niña.

—Claro que lo haré. Además, cuando todo esto termine nos iremos de aquí y nos alejaremos de toda conexión con los hombres lobos y, como dijo su padre, ella no soportaría eso, aunque yo quisiera llevármela.

Eso es cierto. ¡Oh, Oliver! ¿Se querrá ir conmigo?, no lo creo. Lo más probable es que me encierre en una torre de este palacio para que no me escape.

—Y, ¿no crees que sufrirá? Ella es loba, también sentirá el vínculo.

—Sí, lo sé. El papá de José me explicó que si la rechazo ahora, morirá de dolor.

—¿Qué? —pregunté muy preocupada.Si yo no acepto a Oliver, ¿él morirá?

—Sí y yo después de ella. Así que tengo que esperar que ella sea mayor y fuerte para que ella soporte esto —dijo muy triste.

—Uh. Yo creo que si crece igual de bonita que su hermana, no la dejaras.

—¿Ah? No lo creo, en ese entonces yo también seré más viejo —dijo meditandolo.

—Ella tendría 18 y tú 25, no sería tan malo —le dije sonriéndole y él se puso a pensar un momento.

—¡No! Rosali, no me metas ideas. La rechazare y punto. Tengo que ser fuerte y acabar con todo vínculo con este mundo —dijo decidido.

—Pero, aunque nos alejemos de esto, tu seguiras siendo lobo.

—Para ese entonces lo sabré controlar, como el papá de José que ha vivido tantos años como persona normal sin ser descubierto.

—Bueno, si tú lo dices.

—¿Me parece o tú te quieres quedar acá?

—¿Quién? ¿Yo? No, solo que me da pena esa pobre niña y como le romperás el corazón. —Bueno, también no quiero dejar a Oliver, pero no le puedo decir eso.

—No me ocultas algo, ¿verdad?

—Para nada hermanito —le digo lo más segura que puedo.

—Enana, ahora en adelante tenemos que estar muy unidos. Estoy seguro que el rey va a aprovecharse de todo lo que estoy haciendo.

—Entonces, ¿por qué aceptaste todo esto?

—Ya te lo dije, Rosali. No tengo opción. Además, no me importa si se quiere adueñar de todos los lobos del mundo y me utilice para eso, yo también ganaré mucho con todo esto.

Mi hermano tiene razón. Si él es rey, ¿por qué no solo impone su voluntad y nos libera de todo esto?, ¿por qué si Oliver es príncipe, tuvo que aceptar una supuesta misión de otra...? ¿Cómo se llamaba? Manada, creo. Que idiota soy, ellos solo quieren utilizarnos y yo besuqueándome con Oliver como si nada. Le tendré que sacar información sin que sospeche nada.

—Sí, tienes mucha razón. —Rosali no llores como siempre lo haces ya has llorado dos veces este día.

—José y yo tendremos que ir con cuidado y no confiar tanto en ellos, en especial con ese tal Alan, ¿sabías que es mitad demonio?

—Algo así me dijo la hermana de Oliver. —Con razón es tan malo.

—Y tú no te encariñes tanto con las hermanas de Oliver, por más buenas que sean.

—Sí, ya lo sé. —Jeremy tiene razón. A fin de cuentas, ellas deben tener los mismos intereses de su familia.

—Bueno, hermanita, ya me voy. Mañana tienes que ir a tu nueva preparatoria y yo a entrenar como lobo —dice levantándose—. Cuanto extraño el futbol americano —dice melancólico.

—Y yo a mis amigas. —¿Qué estarán haciendo las chicas? ¿Me extrañaran?

—Adiós, enana —dice, me da un beso en la frente y se va.

Cuando me encuentro sola me siento mal, no sé si confiar en Oliver o no. Todo me parece muy confuso y extraño. ¿Qué pasa si Jeremy al final quiere ser el jefe de esa manada? ¿Lo mataran? Si a mi padre lo mataron por estar con una humana, ¿qué harán conmigo cuando mi hermano mate a ese monstruo? Ya no les serviré ¿verdad? Ya no creo que Oliver me quiera a su lado. ¿Y si me equivoco y Oliver si me ama? Ah, esto es muy difícil. Necesito hablar con José y contarle todo esto, es el único amigo que tengo y le puedo contar cosas sobre Oliver. Mejor dormiré, ya mañana hablaré con José.

ALFA KINGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora