ALFA KING

CAPÍTULO 18.- primer fragmento

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—Papa, tengo algo muy importante que decirte, ¿Tienes un momento para mi? .—Entre a su despacho y cerré la puerta despacio, el me miraba serio dejando los papeles encima de su escritorio.

—Si, hija dime ¿tienes algún problema?—alzo su brazo indicando que me sentara delante de él.

—Si... digo ¡no!, bueno, vengo hablar de un asunto importante.

Mi familia había llegado hace 2 días a la isla y yo no sabía cómo contarles que Alex era mi mate, mi hermano me había notado rara y mi cuñada sospechaba de que se trataba. Ayer en la antesala de la boda, después de la reunión de las 10 manadas principales, Alex ni siquiera se había dignado a mirarme, se notaba que él y los demás de su grupo estaban en problemas, así que no le di mucha importancia. También me llamó mucho la atención de que Rosali, su hermano y José no estaban en la ceremonia.

—¿Qué deseas?

—Eh... encontré a mi mate—mi corazón latía muy rápido.

Su ceño se frunció y se puso un poco tenso.

—¿De quién se trata?—su voz se puso más ronca.

—Alex Hoffman—dije un poco bajo.

—¿El gemelo del príncipe Alan?—parece muy sorprendido.

—Si, es el— ojalá no se oponga.

—¿Te diste cuenta ayer que estuvimos en la reunión?—oh mierda.

—Ah... hace tres meses—confesé.

—¡¿Encontraste a tu mate hace tres meses y no me contaste nada?!—se paró golpeando la mesa—. ¿Te ha hecho algo?.

—No, no, no, no es lo que piensas padre—dije rápidamente.

—¿Qué pasa aquí? —entró mi hermano Matthew al despacho.

—¡Tu hermana ha encontrado a su mate hace tres meses!, ha estado con él en esta isla y nosotros sin saber nada—mi padre caminaba de un lado a otro furioso.

— ¡¿Que?!—grito mi hermano—. ¿Quién es? ¿Te ha obligado a algo?

—No—grite— Alex sería incapaz, el me respeta mucho y quiere esperar hasta que yo termine la escuela para comprometernos.

—¿Comprometerse? ¡Ja! , ¡sobre mi cadáver!, primero tiene que conseguir mi consentimiento y créeme cuando te digo que no se lo pondré fácil— dijo Matthew muy histérico.

—Eso es cierto, no me importa su rango, primero tiene que tener nuestro permiso—mi padre se sentó de nuevo.

— ¿Rango? ¿hablamos de un alfa?—preguntó Matthew.

—No, hablamos de Alex Hoffman—le respondió mi padre.

—¿El otro gemelo?—Matthew estaba más sorprendido que mi papa.

—Ese mismo —le dije yo.

—Pues me vale tres unicornios que sea un miembro del escuadrón del príncipe y que sea hijo de satanás ¡nadie se acerca a mi hermanita!

—El no es demonio como el idiota de Alan—le dije.

—¿También conociste a su hermano?—me pregunto mi papa.