ALFA KING

CAPÍTULO 4.-tercer fragmento

Jeremy pudo sentir el olor a vampiro, aunque estos lo estuvieran observando a metros de distancia, pudo percatarse como José lo miraba con miedo. Se encontraban finalizando un juego de fútbol americano. Jeremy no era creyente, pero en esos instantes se encontraba rezando mentalmente para que los vampiros no dañen a ninguna de las personas que se encontraban en esos momentos alentando a sus equipos universitarios favoritos.

—Son varios.

Le dijo José cuando ya se encontraban en las duchas

—Si, al menos diez están aquí—dijo Jeremy.

—¿Crees que ataquen a alguien?—preguntó asustado.

—No lo creo, ellos solo vinieron a buscarnos a nosotros.

Jeremy y José se cambiaron rápido. Salieron del lugar evitando a sus compañeros del equipo de futbol que querían celebrar el triunfo con los dos mejores jugadores del equipo, pero como siempre, los dos pasaron totalmente de ellos.

—No parecen ser la clase de personas que se creen mejores que los demás— dijo el capitán del equipo—. Pero me pregunto cuál es la razón de que nunca quieran socializar con nosotros.

—Para mí que son gay, son pareja y lo ocultan— dijo otro miembro del equipo— .Seguramente piensan que los juzgaremos.

—Eso no tiene sentido—dijo otro—¡Yo soy gay y estoy en el equipo!

—No creo que sean gay, pero creo que si ocultan algo— dijo el subcapitán—. Esos dos son muy extraños.

***

Jeremy caminaba junto a José por el campus de la universidad siento seguidos desde lejos por el grupo de vampiros. Las calles de la universidad estaban llenas de universitarios eufóricos por la victoria de su equipo de Futbol americano. Todos los que los reconocían los paraban para saludarlos y agradecerles.

—¡Chicos!— escucharon la voz de Lauren, voltearon y vieron como ella llegaba corriendo a ellos—. ¡Felicidades!

—Vete— Jeremy la abrazo y la miró suplicante.

Lauren los observó y pudo notar miedo en los dos, entendía qué estaba pasando.

—No, yo los seguiré...

Lauren fue interrumpida por José, que fue directamente a ella y la beso. Jeremy los observaba con una mueca de asco en su rostro. Pero sin sorprenderse, sabía que esos dos se traían algo.

—Me gustas mucho— le dijo José separándose de ella—.Y te prometo que estaremos bien.

Lauren se quedó estática mientras veía como Jeremy y José se alejaban.

—Lo siento, debí decírtelo—le decía José a Jeremy.

— ya lo sospechaba—Jeremy lo miraba molesto—. Pero eso no significa que me agrade la idea.

—¿A dónde iremos?

Los dos ya se encontraban en el estacionamiento.

—En las afueras de la ciudad hay un depósito de autos usados—le dijo Jeremy.