Manual: Conquistando a mi Crush {EDITADO}

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Me escondí de inmediato detrás de la pared y mi respiración se volvió más complicada, mientras que James seguía sentado en el mismo lugar, sin hacer ningún movimiento.

—Ya se fueron.
Susurró, estando a espaldas mías.

—¿De verdad?

Apenas podía respirar, el hecho de que quizás se tratara de mis padres me estaba taladrando la cabeza.

—Sí.
Respondió él firme.

Me levanté del suelo, y me sacudí el polvo de mi trasero, mientras observaba que James también se ponía de pie.

—Creo que ya es muy tarde.
Enuncié a duras penas, no quería que se marchara, pero en definitiva tenía que ser cuerda y hacer lo correcto.

—Sí, tienes razón, ya debería irme.
James se acercó a tomar su bicicleta, y se subió a ésta, mientras aguardaba para que lo despidiera.

Me acerqué a él, y recordé que tenía su chaqueta encima, así que se la devolví agradecida. Ambos sonreímos. Ambos nos observábamos de esta forma única en la que sólo existíamos él y yo.

—Bueno, —trastabillé. —Vete con cuidado ¿vale?

James asintió.

—Envíame un texto cuando llegues a tu casa, claro si puedes, sólo para saber que estás bien.
Agregué.

James asintió de nuevo. —Sí, sí puedo nena.

De pronto volvió a pegar sus labios contra los míos, pero en esta ocasión no duró tanto como me hubiese gustado. Cuando me separé de él, sentía mis labios raros, como si de pronto me hubiesen crecido el doble.

Fruncí el ceño y James hizo lo mismo.
—¿Qué pasa?
Inquirió.

—Mis labios... ¿Están hinchados?

James abrió los ojos como platillos de pronto y tuvo que reprimir la risa que se le vino.

—Oh dios, ¿qué te pasó?

Le dediqué una mirada para que no se riera de mi, y golpee su pecho.

—Me mordiste, eso pasó.

James sonrió con orgullo, y negó con la cabeza. —Ahorita que llegues a tu casa te pones hielo y ya está.

Asentí con la cabeza, y comencé a caminar hacia mi casa, tras despedirlo con la mano, y él hizo lo mismo.

Oh joder, mis padres van a matarme, porque ahora tienen mis labios como evidencia de que tuve una larga sesión de besos bajo la cantera.