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La patrulla se encontraba justo en la esquina de la calle, James bajó la velocidad en cuanto pasamos a su lado, y ambos policías nos miraron con recelo, mientras yo tragaba saliva nerviosa.

Pasamos de ellos, y por fortuna nos ignoraron, sentí un gran alivio de inmediato, hasta podía sentir mi corazón latir de nuevo.

—Joder, un minuto más y nos habrían mandado a la cárcel.
Espetó James con el ceño fruncido, y lucía igual de aliviado que yo.

Asentí con la cabeza, y por alguna razón me llevé la mano a mis labios, sentía algo extraño en ellos, sobre todo en el labio superior.

—James...
Me giré ligeramente hacia él y cuando me vio abrió los ojos como platillos.

Oh santas vacas, tengo que tener algo malo porque su rostro era de total impresión.

—Oh, no puede ser.
James comenzó a carcajear sin inhibiciones, y podía sentir mis mejillas ruborizarse, podía sentir el calor en éstas. Me observé en el espejo retrovisor y casi se me salen los ojos cuando me percaté de que mi labio superior estaba completamente hinchado.

Joder.

Toqué mi boca con cuidado, y sentía un tremendo dolor en éstos. James seguía riendo, y tengo que admitir que estaba comenzando a avergonzarme mucho.

—Ya cállate James.
Murmuré a regañadientes y lo miré mal.

De inmediato cesó su risa y su semblante cambió a serio. —Ya perdona, ¿quieres que consiga algo para que te pongas?

Dios mío, esto era horrible, parecía la madre de las kardashian cuando le inyectaban el botox y le causaba alergia.

James se detuvo afuera de una pequeña tienda de artículos y se bajó sin más del auto. Pasaron sólo unos segundos cuando volvió al coche junto a una botella de agua.

—Toma.
Me tendió la botella helada, y le agradecí, la puse en mi boca y presioné ligeramente. —»¿A tu casa?

Asentí con la cabeza, aún llevaba la botella en mis labios. James encendió el motor y arrancó.

Recorrimos las calles en completo silencio, y eso estaba comenzando a ser incómodo, era un silencio raro. Él concentrado en conducir y yo concentrada en reducir el hinchazón.

Cuando llegamos afuera de mi fraccionamiento me giré hacia él y sonreí. —¿Ya está menos hinchado?

—Sí, ya está bajando.
James ni siquiera me miraba a los ojos, veía fijo hacia en frente. Asentí con la cabeza y no pude evitar sentir un nudo en el estómago y por alguna razón me dolía el corazón.

—Vale, muchas gracias por traerme, nos vemos luego.

James asintió con la cabeza. Su semblante era frío e impenetrable.

—«El seguro.
Me limpié la garganta y esperé a que él quitara el seguro bloqueado de la puerta.

—Oh sí.
Murmuró en voz ronca y lo desbloqueó.

Le di una última mirada pero él continuó mirando hacia la calle, podía sentir perfectamente una parte de mi romperse y por alguna razón todo lo bueno del día se había convertido en negativo. Abrí la puerta del auto, y bajé sin más.

—Cuídate.
Mascullé entre dientes y no pude escuchar su respuesta porque cerré la puerta de inmediato. James aceleró en seguida de haberme bajado, y me maldecí enseguida por sentirme de esta forma tan estúpida.

N/A:
Quiero comentarles que últimamente he recibido comentarios groseros y despectivos contra el personaje de April, lo cual no me molesta porque cada quien es libre de expresarse, pero a esa chica en cuestión, quiero decirle que si yo he escrito la historia no es para pedir tu opinión ni para recibir comentarios sin fundamentos. Comencé a escribir esta historia porque creo que les podría servir a muchas de ustedes que están pasando por lo mismo, no quiero que cometan errores. Todo esto tiene un mensaje detrás de la historia, vale, entonces a esas personas que critiquen, adelante pero por favor háganlo de forma constructiva.

XOXO

Manual: Conquistando a mi Crush {EDITADO}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora