Solo contigo

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Narra michelle

mateo no se controlaba al morder mis tetillas dolían mucho me coloco una pomada me presto una camiseta yo acomode mi cabeza en su brazo nos quedamos mirando uno al otro paso su mano por mi mejilla ahí la dejo haciéndome caricias que se sentían bien no decíamos nada quedamos así mirándonos comunicándonos con la mirada después de unos minutos Mateo cerro sus ojos se quedo dormido yo lo contemplaba ahora era yo quien le paso la mano por su rostro acaricie con la yema de de los dedos sus labios, me quede despierto mirándolo fijamente no supe en que momento quede dormido desperté por los ladridos de los perros de la calle Mateo seguía dormido me preocupe que mi madre ya estuviera de despierta tenia que volver a mi cuarto di unos paso sentí como escurría de mi trasero el semen es un hermoso despertar y verte así dijo mateo se había despertado y ahora me miraba con un gesto de satisfacción.

se levanto de la cama tomo pañuelos desechables con una sonrisa de oreja a oreja me pregunto si quería que él me limpiara quite de sus manos los pañuelos lo pase por mis piernas hasta subir a mi entrada ahí estaba mateo fascinado con lo que estaba viendo con un puchero en la cara le dije que no me mirara que me daba vergüenza pero el muy cínico dijo que ya había visto mi cuerpo enterito desnudo que no debía porque sentir vergüenza se acerco rodeo mi cintura con su brazos sera mejor que tomes una ducha te llene de mucho semen anoche que llegaras tarde a la escuela me cargo en brazos me alarme iban a descubrir que me quede en su cuarto, bájame le dije no me hizo caso me llevo hasta el baño dijo que me bañara rápido que él haría el desayuno.

Me bañe lo mas rápido posible cuando salí mateo ya había preparado el desayuno era algo simple pero se veía delicioso no sabía que pudiera cocinar me acerque a la mesa pique con los dedos sentí sus brazos en mi cintura pregunto si sabía bien.

Esta delicioso le respondí mientras seguía comiendo estaba hambriento Mateo me dijo que fuera a cambiarme que él iría a despertar a su padre luego tomaría una ducha me dio una mordida suave en mi hombro para luego caminar al cuarto de nuestros padres pude escuchar el grito de alarma de mi padrastro sus rayos llegare tarde se oían a cada rato.

Mi madre salio apurada a la cocina pero para su suerte todo ya estaba listo dio un suspiro de alivio yo termine de comer corrí a cambiarme justo salia Mateo del baño con agua todavía escurriendo de su cabello lo vi mas guapo que nunca quede embobado mateo se dio cuenta que lo miraba dijo que si quería podía tocar que todo eso era mío, me sonroje comenzó a caminar hacia mí en eso sale mi padrastro de su cuarto nos grita que nos apresuremos a alistarnos que llegaríamos tarde a la escuela entre de inmediato a mi cuarto.

Caminaba a la escuela al lado de Mateo hablábamos sobre ir a comer algo después de clases sentí que me fallaron las piernas, estaba por caer al suelo pero sentí los brazos de Mateo sosteniéndome pregunto si estaba bien le pedí que me ayudara a sentarme me cargo hasta una banqueta paso su mano por mi rostro estaba preocupado dijo que volveríamos a casa.

Estoy bien le dije pero él seguía con la idea de volver se inclino frente a mi luego asentó su cabeza sobre mis piernas me pidió perdón que esto era resultado por lo de anoche, yo acaricie su pelo mientras le decía que ya estaba mejor que continuemos que hoy tenía un examen que se pospuso ayer.

Se levanto dijo que esperara corrió a una farmacia trajo unos calmantes y un jugo para poder tomar las tabletas, como íbamos bien de tiempo estuvimos unos minutos sentados luego Mateo dijo que como no quería regresar a casa me llevaría en su espalda hasta la escuela.

No me dejo opción era ir en su espalda o que me lleve como princesa en sus brazos, yo me sentía mejor pero Mateo no me creía nos pusimos en marcha todos nos miraban pero no parecía importarle a él.

Yo me sujetaba de sus hombros le pedí que me bajara que de seguro estaba pesado pero comenzó a reírse para luego decir que era mas liviano que una pluma que estaba preocupado que no era normal que pesara tan poco, con mis brazos rodee su cuello tratando de ahorcarlo hasta que se retracte de sus palabras pero nunca lo hizo desde entonces no quite mis manos de su cuello deseaba que se alargara el camino para estar así mas tiempo.