La hija de mi sirvienta

¿Enemigos?

Estaba por anocher y me encontraba bastante aburrida, al final decidí ir a visitar a mi querido Dorian en su oficina así que caminé por el largo pasillo que daba a ella y sin tocar abrí la puerta pero enseguida me arrepentí de haberlo hecho porque al parecer él se "encontraba muy ocupado". Por ocupado me refiero a que estaba semidesnudo y tenía encima suyo a una mujer.

---Upss!!
Se me salió decir, enseguida cerré la puerta y corrí hacia mi habitación.

Si tuviera un corazón debo decir que en éste momento estuviera completamente roto, pero como no tenía uno pues no sentía nada, bueno si tal vez si sentí un poco de celos.

Me cambié de ropa y le escribí a Lucia.

S:¿Vamos por unas cervezas al bar de Michael?

L: Me encanta tu manera de empezar la semana...

S: Lo sé, nena por eso me amas..

L: Paso por ti en 20 minutos, vístete sexy como me gusta a mi.

S: Claro..preciosa.

Dejé mi móvil para cepillar mi cabello hasta que alguien tocó la puerta.

---Voy..
Grité dirigiendome a la puerta para abrirla.

---Lamento que hayas presenciado aquella escena en mi oficina, pero debes aprender a tocar la puerta antes de entrar a cualquier lugar.

Bufé por lo bajo.

---Disculpame a mi, por interrumpir "Tu trabajo".
Hice unas comillas imaginarias con mis dedos al decir lo último.

El castaño me miró de la cabeza a los pies.

---¿Saldrás a esta hora?
Me miró extrañado.

---Sí, ahora con tu permiso me voy.
Cerré la puerta de mi habitación y le empecé a poner seguro.

Él seguía ahí parado, viéndome.

---¿A dónde vas?
Voltee a verlo con molestia.

---Miré señor Deluxo...yo no me meto en su vida y usted no se mete en la mía ¿Estamos?

Puse mis manos en mi cintura en forma de jarra y lo miré fijamente, moría de iras.

Como siempre su rostro era totalmente inexpresivo ahora.

---¿Acaso saldrás con tu novio?
Cuestionó mirándome divertido.

---Eso es algo que a ti no te importa..
Espete molesta.

Se carcajeo.

---Calmate..y no me hables de esa forma porque de lo contrario, le diré a tu madre que no te dejé salir.

Sonrió victorioso.

Me acerqué más a él, tanto que nuestras respiraciones se mezclaban.

---Y yo le diré que nos acostamos y veremos a quién le va peor.

Su sonrisa se esfumó y su ceño se frunció, yo sólo me encaminé hacia mi destino

---Eres una...
Lo escuché decir mientras me iba.

---Yo también te quiero, Bye.
Le dije a lo lejos.

Bajé las gradas con rapidez y al llegar me encontré con mi madre acompañada de una mujer, era aquella mujerzuela que se había acostado con Deluxo hace un par de horas atrás.

---Cariño..¿A dónde vas? quiero que conozcas a Paula, es amiga de Dorian.

La mujer en cuestión me miró con una sonrisa fingida en su rostro.