Prefecto

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Días después...

---Hola Sofia ¿Como estais?

Guarde silencio por un par de segundos, no planeaba contarle a Ernesto nada de lo ocurrido en la piscina.

---Me enteré del incidente en la piscina olimpica.

Rodee los ojos, al parecer este sujeto se enteraba de todo.

---¿Cuál incidente?

Me hice la desentendida y fingi demencia.

---Aquél en el que casi te ahogas.

Rei restando importancia a lo que decía.

---Estas exagernando un poco, solo me di un chapuzon.

---¿Por que lo hicisteis?

La mirada meticulosa de Ernesto sobre mi empezaba a incomodarme.

---Quería probar que tal estaba el agua.

Respondí firmemente.

---¿Que os pasa con Rhett Kozac?

Desvie la mirada evitando el contacto visual.

¿Cómo es que sabía tanto?

---Nada, no se de que hablas.

Ernesto se puso de pie y camino hacia donde se encontraba una cafetera.

---¿Os apetece?

Sirvió un poco de café en un vaso y me lo ofreció.

---No gracias.

Solo quería largarme y como siempre que venía hasta aqui, el tiempo transcurria muy lento a mi parecer.

---Bien, en vista de que parece que hoy no deseáis hablar pues, te dejaré irte antes.

Mi rostro se iluminó por completo.

---¿Es enserio?

Rapidamente me puse de pie antes de que se arrepintiese de dejarme ir.

---Si, os hablo enserio.

Me despedi del psicólogo y me dirigi hacia la cafeteria en donde me encontré con Mario y Carmen.

---Hola chicos...

Entré saludando a mis amigos.

---Hola cariño.

Saludó Mario.

---Hola nena.

Me saludó Carmen.

Tomé asiento en el único lugar vacío que encontré pero algo llamó mi atención, mejor dicho alguien.

---¿Y tu quién eres?

Un chico rubio totalmente desconocido y de lentes se encontraba junto a Mario.

Escuché una risilla proviniente de Maria.

---¡Ay cariño! Olvidé presentarte a Pablo.

El tal Pablo me sonrió de oreja a oreja.

---Es nuevo...

Agregó Carmen.

---Es un placer conocerte, todo el mundo habla de ti, eres más hermosa de lo que imagine.

Iba a agradecerle a Pablo por su hágalo pero justo Rhett y sus amigotes se situaron frente a mi.

---Quiero sentarme aqui, largo.

La hija de mi sirvientaWhere stories live. Discover now