Capítulo 25

78.4K 6.6K 722
                                    

Unos segundos después Hurs irrumpía un tanto nervioso en la oficina pesar de su sonrisa con las dos mujeres Kannavage sabiendo que se estaba viendo cómo un idiota sin sentido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Unos segundos después Hurs irrumpía un tanto nervioso en la oficina pesar de su sonrisa con las dos mujeres Kannavage sabiendo que se estaba viendo cómo un idiota sin sentido.

  Brooke se acercó de inmediato a Maddox segundos antes de que Melina apareciera.

—Veo que hay mucha felicidad —dijo burlándose sabiendo la tensión entre Max y Maddox—. Hurs me debes un baile.

 A Melina no le pasó desapercibido el gesto de desagrado de una de las Kannavage por lo que continuó cuando él le dió un guiño y extendió la mano.  

—Gracias —dijo sin moverse de su lugar—. Tal vez quiera más que un baile.

—¡Por las barbas de Merlín! —dijo Hurs—. Deja tus propuestas indecorosas que me sonrojas.

   Por un momento Hurs olvidó que Scarlett estaba ahí y que sus amigos lo iban a molestar tanto como Melina iba a incordiar. Olvidó que sus amigos siempre buscarían una manera de desviar la atención del problema.

 Melina observó a la hermana de Brooke que aunque no la miraba se veía furiosa.

—Quiero irme a casa ya, Brooke —dijo Scarlett sorprendiéndolos a todos.

Las miradas se posaron sobre ella que parecía realmente molesta y nadie sabía por qué.

—Puedo llevarte —dijo Hurs tomando su brazo.

—Gracias —respondió soltándose de su agarre—. Vine con mi hermana y me voy con ella, no me gustaría que pierdas tiempo conmigo cuando puedes estar con tus amigas.

  Max comenzó a reír y más cuando vio a Hurs mirar a Maddox desconcertado.

—¿Por qué no te quedas aquí? —dijo Maddox pasando su brazo por los hombros de la chica y salvando la situación—. Brooke y yo tenemos algo que decir más tarde y estoy segura que a ella le gustaría que estuvieras aquí.

—Sí —añadió Brooke—. Quiero que estés conmigo más tarde.

—¿Entonces podemos ir abajo? —sugirió haciendo que su hermana frunciera el ceño.

—Por supuesto —respondió.

—Las acompaño —agregó Hurs pero la mano en el aire de Scarlett lo detuvo.

—Quiero platicar con mi hermana —dijo y extendió la mano esperando a que su hermana la guiará.

 Brooke lo hizo mirando alrededor sin entender y dejando a las cuatro personas en el lugar en completo silencio.

—¿Qué carajos le pasa? —inquirió un consternado Hurs.

—Celos, se llaman celos —dijo Maddox—. Melina no ha dejado de coquetear contigo desde que entró.

—¿Estabas coqueteando? —preguntó Hurs mirándola directamente.

—Descaradamente —respondió Melina.

DOMAR A LA BESTIA (EL CLUB DE LOS DESTERRADOS 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora