TRAS LAS HUELLAS DE SU NOMBRE - (Girl x Girl)

CAPITULO 22.- "CONTROL SOBRE RESPUESTAS"

CAPITULO 22.-

"CONTROL SOBRE RESPUESTAS"

Recibo con cuidado el casco que me entrega Lena, me lo pongo con cierta dificultad y ella sonríe al vérmelo puesto. Si mi padre se entera de lo que estoy haciendo....Un dolor se apodera de mi estómago, pero trato de evitarlo.

Lena sostiene con paciencia la mato para que suba desde el lado izquierdo, una vez arriba, se sube ella sin dificultad. Hay suficiente espacio para ambas, pero la idea de apoyar mi cuerpo en contra del suyo, y rodear su cintura con mis brazos es demasiado tentadora.

¡Concéntrate en la misión!

Sé que debo enfocarme en averiguar qué está sucediendo y no distraerme con las sensaciones que Lena provoca en mí, pero el conflicto entre lo racional y emocional, provocan que mi mente de brincos sin clemencia. Por un lado, la creciente necesidad de tocarla, por otro, los recientes acontecimientos: La fiesta, Fiona, mi padre, mi tío.

¡Todo!

-Puedes afirmarte de mí si quieres – propone ella, casi leyendo mi mente y tentando cada una de mis últimas murallas emocionales

¡Concéntrate en la Misión!

Concéntrate.... En....

Eh....

Vencida por las sensaciones, me dejo caer sobre su espalda. Siento como se tensa, respira y luego se relaja.

No soy la única afectada con todo lo que está sucediendo.

-Debes seguir con tu cuerpo el movimiento que voy haciendo con el mío –explica haciendo un ejemplo inclinándose hacía el lado derecho. Sin dificultad, sigo el movimiento.

Tenerla tan cerca, sentir su aroma, me confunde cada vez más. Sé que debo odiarla por haberme traicionado, por haberme dejado, pero una fuerza irracional hace que la balanza se incline cada vez más a solo dejarme llevar y dejar de pensar.

¡No!

No puedo traicionarme a mi misma de aquella forma. Debo resolver qué esta sucediendo, debo mantenerme firme.

-¿Lista? – Me pregunta revisando todo en el tablero donde se encuentra una pantalla con varios datos. Habiendo ya perdido gran parte de la batalla, solo asiento con el casco. Lena avanza con los pies hasta llegar a la carretera y cuando ya estamos a suficiente distancia de la casa, mueve la manilla de embrague junto a la de velocidad un par de veces. El motor ruge al instante.

Ahora entiendo por qué ha querido alejarse de la entrada.

Vamos poco a poco tomando velocidad, probando la inclinación en ciertas curvas. Siento que ambas nos movemos en perfecta coordinación, como si siempre hubiese seguido las instrucciones de su cuerpo. Noto que cambia la marcha y acelera antes de tomar otra curva. Me agarro con fuerza a su cintura.

Por alguna razón, no siento miedo, mas bien un extraño placer, el volver a gozar la sensación de adrenalina, de perder el control y saber que Lena lo tiene...Excepto tal vez....Y la imagen de Lena en el estudio observándome en aquel vestido llega a mi mente. La idea de dominar sus emociones y movimientos elevan aun más el entusiasmo previo, un goce nuevo y diferente.

Inundada en sensaciones, me atrevo a subir las manos hasta el inicio de su pecho para entrelazar mis dedos en un fuerte apretón. Siento que el cuerpo de Lena se tensa y cambia de posición al responder a la silenciosa orden. La adrenalina sube e inunda cada vestigio racional de mi mente. Lena hace otro movimiento con las manos y la moto responde aumentando la velocidad. Su cuerpo se balancea en una curva, y el mío lo sigue como un perfecto imán. No pudo evitar reír de la emoción, de la sensación de libertad y empoderamiento que solo ella me ha hecho sentir. Mi mente, mi lado racional, me pide a gritos que deje de sentir, y mi corazón, traicionero, no obedece sus órdenes.