TRAS LAS HUELLAS DE SU NOMBRE - (Girl x Girl)

CAPITULO 33.- "No soy Christian Grey"

CAPITULO 33.-

"No soy Christian Grey"

El ingreso al aeropuerto fue por una entrada lateral, la cual admite llegar con el auto hasta la misma pista de aterrizaje. Los guardias no protestaron cuando Lena mostró su apellido, es más, fueron serviciales al preguntar si teníamos equipaje por llevar.

-¿A dónde vamos? –En vez de una respuesta, Lena toma mi mano y nos guía por la pista privada de aterrizaje. El viento revuelve mi cabello, ella lo nota y se detiene produciendo que las dos azafatas a nuestro lado también lo hagan. Les hace un gesto con el mentón y ambas siguen su camino dejándonos a solas en mitad de la pista. Desliza sus lentes de sol hacia arriba quedando sujeto su cabello con ellos. Me observa un segundo, toma de mi cintura y me acerca a su cuerpo.

-Te he dicho que confíes en mí –murmura atrapando un mechón rebelde de mi cabello para colocarlo por detrás de mi oreja. El gesto congela mi respiración.

-Estamos listos Señorita Valachi–Nos informa un piloto que puedo jurar, no estaba hace cinco minutos.

El viento y un estrepitoso ruido me obligan a levantar la vista. De inmediato, quedo fascinada por el elegante helicóptero que aterriza con maestría cerca del Maserati.

¡Mierda! ¿Un helicóptero? ¿Será de Lena?

Las siglas "V-Corp" grabadas en uno de los costados del helicóptero terminan por responder a mi pregunta.

Lena se gira y vuelve a colocarse sus gafas de sol. El piloto a nuestro lado aguarda a que termine el aterrizar y luego se acerca al aviador, lo saluda en un fuerte apretón de manos e intercambian el mando. Las dos azafatas ingresan para dejar dos bolsos y luego bajan despidiéndose de Lena con un movimiento de cabeza. Me siento como en una película

-¿Estás lista? –Me pregunta al recibir un gesto del piloto para que ingresemos.

-¿Para volar? –Murmuro algo nerviosa -¿Yo? –Ella asiente a mi pregunta.

-Estoy segura de que te encantará –Declara confiada. En un movimiento inconsciente, tomo la mano de Lena y noto su confusión, pues por lo general, es ella quien toma de la mía.

-Me sorprende que no pilotees tú –Bromeo antes de entrar a la espaciosa cabina doble rodeada de cuero rojo obscuro.

-No soy Christian Grey –responde al sentarse a mi lado y recibir los auriculares de aviación.

-¿Estas segura? –le pregunto siguiendo su juego y colocándome los auriculares en mi cabeza.

-¿Contigo? –Pregunta seria -¡Mas que segura! –agrega con una sonrisa. De inmediato recuerdo su excitación al arrinconarla contra la muralla.

-¿Listas? –Nos pregunta el pitote por medio de los auriculares. ¿Nos habrá escuchado por medio de los micrófonos?

Miro hacía Lena en busca de una respuesta, pero parece concentrada en su celular. Noto que desliza su dedo por varios mensajes, llamas perdidas y notificaciones en redes sociales. Sin abrir ninguna de ellas, lo coloca en "Modo Avión" y lo vuelve a guardar.

-Listas –Anuncia Lena al Piloto.

-Entendido –Responde y luego aprieta varios botones. -Mayo 124, V-Corp listo para despegar –murmura el piloto.

-Entendido V-Corp, su plan de vuelo hacia el Aeropuerto de la Ciudad de Derry se encuentra confirmado. –responde otra voz. Escucho las hélices moverse con mayor rapidez produciendo que poco a poco nos elevemos. Siento una sensación de hormigueo en mi estómago, Lena lo noto y coloca su mano en mi pierna derecha calmando el movimiento que sin saber estaba haciendo con ella.

¡Mejor el movimiento de mi pierna que otras compulsiones auto lesivas!

-Daniel es un piloto experto –informa con la intensión de calmarme.

-¿Sabes pilotear? –le pregunto para distraer mi mente.

-Puedo aprender si eso te hace sentir tranquila. –Propone con una sonrisa seductora. –Disfrutas bastante en mis autos.–agrega confiada.

¡Disfrutar es poco!

-Me gustarías que aprendieras –Murmuro menos nerviosa por la altura que cada vez se va incrementando. Lena suelta mi pierna, y con la misma mano, toma mi mentón para dirigir mi atención hacía el exterior.

-¡Es hermoso! –Exclamo asombrada por la increíble vista de la ciudad. Sobrevolar bordeando los edificios, las montañas y puentes es una sensación muy diferente que realizarlo en avión.

-Sabía que te gustaría –Murmura complacida. La observo y quedo maravillada por la luz del sol en sus ojos, por el paisaje urbano a su alrededor. Lena muerde su labio inferior. Un escalofrió recorre mi cuerpo, y estoy segura que ésta vez no es producto de la altura.

Poco a poco vamos abandonando la ciudad, pasando por campos y carreteras eternas y rectas. El piloto hace un movimiento hacía la derecha y todo el helicóptero se ladea ocasionando un cosquilleo agradable.

-Gira una vez más –le ordena Lena por el intercomunicador en los auriculares. El piloto obedece y la sensación de hormigueo vuelve aparecer. Sé que en todo momento Lena ha estado observando mis reacciones, disfrutando las expresiones en mi rostro, la forma en que aprieto su mano en la mía. En un último movimiento, el Piloto regresa a la posición original abriendo una vista espectacular.

-¿Los Acantilados? –le pregunto sorprendida por el paisaje marino enmarcado por altos riscos.

-Me has descubierto. -responde al dejar un beso en mi mejilla.