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Capítulo 15 | Descubriendo la verdad

Descubriendo la verdad.

Hanniel.

—Logan no seas marica y acepta que Riley te ganó.

—¡Sí! —apunta Riley a él dando saltos infantiles— Hasta el amargado de Hanniel lo acepta.

Logan tuerce una mueca y sale de la piscina destilando agua por todos lados, se sacude el cabello y se roba las miradas coquetas de un grupo de chicas que están alrededor. El cabrón a pesar de ser un crío ya puede tener los ligues que quiera, pero se hace el loco y no voy a andar de maestro enseñándole como ser sutilmente interesado pero a la vez que le valga verga quien se le lance encima.

—Haces trampa no se vale —le reclama él tomando una toalla secándose el torso destapado.

—¿Cómo que trampa? —abre la boca llevándose una mano a su pecho indignada.

Yo solo los observo, cansándome de sus ridiculeces. Ignorando las miradas lacsivas de las mujeres que están nadando y hasta de las madres de los niños entrenando.

Por otra parte le tiro una mirada fulminante a los mal nacidos que ven con morbo a Riley que carga puesto un traje de baño de una sola pieza.

—Saliste antes del chiflido —reclama Logan.

—¡No! Verdad que no Hanniel —se me acerca Riley y me toca el hombro mojandome.

—Es verdad, acepta Riley —se acerca también Logan despegandose el short que se le pegó a las piernas y a su regazo salpicandome de agua.

Me sacudo con molestia y ellos se ríen.

—Dejen de joder yá —los veo mal y ellos entornan los ojos—. Riley ganó y yá —concluyo levantandome para irme.

—¡Ves! Sé nadar mejor y más rápido que tú —presume ella siguiéndome al parqueo de las piscinas privadas especiales y profesionales para natación.

—Ay como sea —se rinde Logan.

Nos vamos en el auto y ellos no paran de hablar como pericos y a mí me comienza a doler la cabeza recordándome que tengo unas cosas que hacer.

—¿Me llevarás a comprar Hanniel? —me dice Riley inclinandose a mi asiento.

—No.

—Ah ¿Y por qué?

—Porque no.

—No seas así —me sacude el brazo.

—Tengo cosas que hacer.

—¿Y el sábado?

—También, de hecho todos estos días antes de irme a las cabañas.

—¿Entonces quien me va a llevar? ¿Puedes el mismo sábado? recuerda que es nuestro cumple y necesito ropa nueva

—Que te lleve Logan.

Ella se voltea a él y éste levanta las manos quitándose responsabilidad.

—Yo el sábado no puedo —dice. Haciéndonos fruncir el ceño, a mí y a Riley.