Sueños de libertad - Levi Ackerman.

9. "Losing game"

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"Losing game"

El pequeño grupo que se encontraba refugiado dentro del asentamiento pedía a gritos desgarradores ayuda, con la tibia esperanza de que el equipo de exploración llegará a tiempo para salvarlos.

El par de titanes había alcanzado la entrada del asentamiento, y con un solo golpe derrumbó el pequeño cuarto en donde se guardaban los equipos tridimensionales y cuchillas extras. Solo unos pocos soldados habían alcanzado a tomar parte del equipo, sin embargo, no era suficiente para vencer a esos gigantes de cinco metros.

-Mierda -murmuró Levi observando la situación. -Hange, ¿Cuántas cuchillas te quedan?

Hange llevaba su habitual cola de caballo más desordenada de lo normal, uno de sus lentes se encontraba roto y aún existían rastros de sangre en su uniforme de los titanes que habían derribado en el bosque.

-Solo esta -dijo mostrando la desgastada cuchilla que tenía guardada en la funda de su equipo.

-Tch -musitó Levi sintiendo como sus venas saltaban en estrés. - ¿Petra...Giselle?

El panorama era poco óptimo, y es que el par de soldadas elite también habían desgastado sus cuchillas en la ardua batalla en el bosque. Se encontraban perdidos. La única pequeña esperanza que tenían era que Levi se sacrificara por todos ellos, pero el paisaje era desfavorable, no había muchos árboles cercanos de los cuales el capitán pueda enganchar su equipo tridimensional, y el caballo negro parecía cansado por lo que no correría de la misma forma que en el bosque.

-Me queda una, capitán -dijo Petra mostrando la cuchilla de su equipo. -Pero a Giselle...

Los ojos azul grisáceo de Levi inspeccionaron el rostro blanquecino de Giselle, se veía cansada, con el cabello enmarañado y pequeños rasguños en su pequeño rostro.

- ¿Qué paso? -preguntó Levi directamente hacia Giselle.

-Tres titanes venían persiguiendo el grupo, Petra y yo decidimos luchar para evitar que se acerquen al asentamiento -explicó rápidamente la muchacha. -Sin éxito...obviamente -murmuró desanimada.

- ¿El grupo? -musitó Hange con la mirada perdida. - ¡ESO ES! -gritó.

Levi observó a la castaña Hange con su rostro estoico, sabía que no valía la pena preguntar que es lo que estaba pensando la científica, por que tarde o temprano lo soltaría sin más, y secretamente tenía la esperanza de que fuera un elaborado plan.

Hange llevó la punta de sus dedos a la boca y silbó con todas sus fuerzas, sin pensar en las consecuencias ni en los dos titanes que se encontraban desesperadamente buscando alimento.

- ¡HANGE! -dijo Levi dándole un golpe en la cabeza. - ¡HARÁS QUE NOS MATE!

La castaña solo se dedicó a sobar el lugar golpeado con su mano y una pequeña sonrisa en los labios. Cuando Giselle mencionó el grupo, Hange recordó de inmediato que ellos cuatro no eran los únicos que habían logrado escapar del bosque, y es que si Moblit siguió sus órdenes al pie de la letra, se encontraría ya en los perímetros del lugar esperando por la señal.

-Hange, ¿Qué se supone...

En un par de segundos Moblit y seis soldados más aparecieron balanceándose desde los árboles más cercanos hacía ellos, el rostro de Giselle y Petra se iluminó en esperanza.

-Le dije a Moblit que al llegar a la salida del bosque subiera a los árboles y esperará allí -explicó. -Si llegará algún titán a salir...

-Lo siento, Hange-san -dijo Moblit rápidamente. -Después de que Giselle y Petra se ocuparan de los titanes que nos perseguían, aparecieron otros por los lados y derribaron a nuestros caballos, solo pudimos subirnos a los árboles para tener las menores pérdidas posibles.