Demonio en Fodlan

Capítulo 9: Estudiantes potenciales

Goetia cruzó flotando la biblioteca con varios libros en la mano. Había notado que Tomás había comenzado a permanecer cada vez más fuera durante períodos de tiempo más largos en los últimos días. Sospechaba que de alguna manera involucraba sus otras prioridades que no estaban vinculadas a su disfraz.

La única queja de Goetia sería que le dejaba más trabajo. Si bien tenía pocos pasatiempos, había notado que las empresas de Tomas le habían impedido investigar más sobre Crests, simplemente porque se vio obligado a mantenerse ocupado.

"M-señor... ¿Goetia?" Gritó una voz joven, el hombre bronceado se congeló en el aire. No reconoció a este. Miró por el balcón para ver a una joven con el pelo morado entrar en la biblioteca. Su vacilación gritaba por la falta de interacciones sociales. "¿E-estás ahí?"

Levitó los libros a sus estantes y flotó sobre las barandillas hasta el suelo. Evidentemente, la chica aún no se había dado cuenta de que él estaba aquí.

"Bueno, él no está aquí, Bernie". Parecía algo aliviada. "Supongo que puedo volver a mi habitación y..." se detuvo cuando claramente registró una presencia detrás de ella.

"¿Puedo ayudarla, jovencita?" Goetia gritó, la chica se puso rígida y su respiración se aceleró. Durante varios segundos hubo silencio, luego soltó un agudo grito de terror antes de girar y caer al suelo.

"¡No me mates!" Ella gimió y levantó las manos para protegerse de su misterioso agresor.

"Todavía tengo que acostumbrarme a matar a los estudiantes que ingresan a la biblioteca". Goetia comentó secamente.

"¡Oh no!" La chica de cabello morado gimió "¡Vas a ser su primera víctima, Bernie!"

"Te aseguro que no voy a-" Goetia fue interrumpida cuando estalló en otra perorata de desvaríos paranoicos. Rápidamente llegó a la conclusión de que esta chica era una reclusa social en la medida en que imaginaba activamente los peores escenarios.

Durante toda su diatriba, Goetia permaneció en silencio, simplemente la miró fijamente con una ligera confusión sobre cómo sus afirmaciones se volvieron menos basadas en la realidad y casi delirantes.

" Niña ". Goetia habló, su tono probablemente sonó mucho más profundo de lo previsto cuando la niña dejó de hablar instantáneamente y lo miró fijamente, con los ojos muy abiertos y aterrorizada. "Cálmate. No te mataré ni convertiré tu piel en nuevas cubiertas de libros". ¿Para qué viniste aquí?"

"C-bien..." La chica se puso de pie lentamente, aunque deliberadamente evitó mirar en dirección a Goetia "Me... asignaron para ayudar en la biblioteca hoy..."

"Veo." Goetia asintió y pasó junto a ella "¿Tienes alguna experiencia previa con esas cosas?"

"N-no..." admitió vacilante.

"Desgraciado." Goetia simplemente respondió, lo que aparentemente fue suficiente para que ella se estremeciera levemente y temblara con una cantidad aún mayor de miedo. Para su pequeña molestia.

"¿Hay otros estudiantes con los que debería estar ex-"

"¡Ahí estás, Bernardita!" Gritó una voz bastante bulliciosa, Goetia y la niña se giraron para ver a un joven de cabello naranja pavoneándose en la biblioteca, con una mirada de alivio en su rostro "Saliste corriendo antes de que tuviera la oportunidad de hablar contigo sobre la mejor manera de prepararnos para nuestra misión". se detuvo y se dio cuenta de que Goetia estaba de pie junto a ella. "Ah, debes ser el nuevo bibliotecario asistente. Soy Ferdinand Von Aegir, hijo legítimo de la familia Aegir, la casa más importante del Imperio".

"... Goetia". El hombre bronceado respondió: "Asistente de bibliotecario, ¿asumiré que usted y la joven Bernadette están aquí por la misma razón?"