Capítulo 42: ¿Sabías que tenemos un sótano?

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Dimitri se frotó los ojos con cansancio mientras Claude dirigía al cuarteto a través del Monasterio, el sol ni siquiera había salido cuando el líder Golden Deer irrumpió virtualmente en sus habitaciones y los arrastró a todos fuera de sus respectivas camas.

Baste decir que todos ellos se veían tan mal como cabría esperar por haberse despertado al amanecer. La notable excepción a esto es el responsable del despertar temprano en la mañana y la propia Profesora. Aunque Dimitri atribuyó eso a su vida como mercenario dejando poco tiempo para períodos prolongados de sueño.

No era un mercenario, por lo que las bolsas debajo de sus ojos y las de Edelgard eran más notorias.

"Claude..." La Princesa del Imperio Adrestiano advirtió mientras se acercaba a él "Será mejor que esto sea importante... en este momento..." fue interrumpida por un bostezo, levantando su mano para cubrirse la boca mientras Claude la miró pacientemente "-en este momento, estoy considerando despertar a Hubert y decirle que te venga por esto".

Claude parpadeó y luego esbozó una leve sonrisa "¿Y así anunciar públicamente tus intenciones de asesinato? Eres más audaz de lo que esperaba".

"Tiendo a ser menos indulgente cuando me molestan tan temprano en la mañana". Ella lo miró con los ojos entrecerrados. "Ahora... explica esto, rápido".

"Estaría feliz de." Claude levantó las manos apaciguadoramente "Pero por el momento, creo que sería mejor si te lo muestro primero. Teniendo en cuenta que es más probable que me creas después de haberlo visto".

"¿Viste qué?" Dimitri inclinó la cabeza.

Eso arruinaría la sorpresa. Claude respondió, mirando a Dimitri como si hubiera dicho algo increíblemente estúpido. "Así que... ya sabes... es mejor mostrar que contar".

"Claude". Dimitri sacudió exasperadamente la cabeza antes de simplemente levantar la mano y hacer un gesto para que el Golden Deer diera el paso: "Muy bien... cuanto antes se aborde esto, antes podremos dormir".

"Yo... no estaría tan seguro de eso." Claude sonrió con complicidad cuando se dio la vuelta y aceleró el paso. Los tres lo siguieron mientras se aventuraba más a través del monasterio y hacia el área alrededor de la parte trasera de los edificios principales, lejos de la vista de la mayor parte del monasterio. "Escuché algo anoche y pensé en echar un vistazo".

"¿Y está relacionado con un lugar apartado?" Edelgard levantó una ceja "Ya tengo mis dudas".

"Toda esta desconfianza, su alteza". El niño suspiró juguetonamente "Y aquí salgo de mi camino para incluirlos a todos en lo que he descubierto".

"Von Riegan-"

"Vaya, ¿incluso tú enseñas?" Claude le envió una mirada traicionada "Estás empezando a sonar como Sparkles". sacudió la cabeza y luego miró en dirección a Dimitri. "Aunque... supongo que con el tiempo que pasan juntos..."

"Claude". Dimitri lo miró en blanco, cortando lo que iba a decir a continuación. "Este no es el momento para tus bromas. Estamos todos muy cansados ​​y preferiría que nos revelaras lo que has descubierto rápidamente para que podamos ocuparnos de ello, o volver a nuestros aposentos.

Edelgard le envió una mirada sorprendida por la forma en que él había respondido antes de resoplar divertida y cruzarse de brazos, enviando una sonrisa a Claude. "¿Y bien?"

"Bien." Claude se encogió de hombros, sin importarle el lenguaje utilizado mientras se daba la vuelta y continuaba su camino a través de los terrenos del monasterio mientras entraban en un camino poco profundo y atravesaban los edificios adyacentes. Dimitri y Edelgard fruncieron el ceño mientras Byleth permanecía impasible ante el camino por el que los conducía. Todo el grupo lo siguió hasta que emergieron a un pequeño claro.

Demonio en FodlanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora