Demonio en Fodlan

Capítulo 57: El tiempo de la extinción

Siguió un silencio absoluto después de que los dos hablaran, Goetia se paró en la entrada del gran salón con una expresión pensativa en su rostro. Rhea, parada detrás de él con el ceño fruncido, sus ojos se apartaron brevemente de Sitri y se dirigieron hacia los prisioneros.

Sus ojos brillaron momentáneamente con alivio cuando vio a Byleth vivo e ileso antes de que se endurecieran nuevamente y volvieran a mirar a Sitri. Rhea nunca había visto nada parecido antes, completamente inhumano, pero tampoco era un dragón. Tampoco se parecía en nada a esas alimañas que se habían escondido debajo del planeta hace un milenio.

El nombre que Goetia había pronunciado también la había hecho desear negar con vehemencia que esta cosa tuviera algo en común con el Sitri que conocía.

" Has disminuido, Salomón". La criatura volvió a hablar con un tono de voz engreído, mirando a Goetia desde el otro lado de la habitación sin hacer un esfuerzo por moverse. Rhea frunció el ceño brevemente ante la voz que usó. Siendo así, era idéntico a Goetia, consolidando aún más su creencia de que había un vínculo entre los dos.

Sin darse cuenta del dilema interno de Rhea, Sitri continuó con su discurso: " Si estuvieras en tu mejor momento, el mísero campo delimitado que construí como defensa se habría roto en unos momentos". su cuerpo permaneció flotando en el aire, un anillo de gemas rojas dando vueltas detrás de ellos " Careces de autoridad sobre mí y ya no tienes ninguno de los Anillos. Tal como está, estás lejos de ser la amenaza que solías representar".

"Lo mismo vale doblemente para ti, Sitri". Goetia respondió rápidamente, Rhea detectó quizás un toque de urgencia en su voz.

Sitri no hizo ningún esfuerzo por responder, simplemente frunció el ceño a Goetia desde el otro lado de la habitación.

"Tu forma está gastando más energía mágica de la que tienes en tus reservas". Asintió hacia los anillos de luz que tenían a Byleth y a los demás prisioneros. "Tu verdadero cuerpo ha sido destruido. Esto es simplemente un caparazón que has construido e incluso así, no puedes mantenerlo por mucho tiempo". Goetia explicó más, con el ceño fruncido. "A tu ritmo actual de consumo, gastarás tu energía mágica en los próximos diez minutos. Cinco si haces un esfuerzo por atacarme".

Hubo un silencio por unos momentos.

"... Esta es tu última jugada, Sitri". Goetia entendió, sus labios se dibujaron en una fina línea. "Esta es tu táctica final. No es de extrañar que te hayas visto reducido a perseguir el Cáliz de los Comienzos. Ya no tienes la capacidad de cimentar tu propia existencia".

" ¡Y es obra tuya, Salomón!" Sitri ladró desde el otro lado de la habitación, su voz resonando con justa ira "¡ Nuestro gran trabajo, tres mil años desperdiciados por tu culpa! ¡Tú y Chaldea!" levantaron el brazo derecho y apuntaron con un dedo en dirección a Goetia " ¡Apenas logré escapar del Templo cuando se derrumbó a mi alrededor! ¡Mientras mis parientes se quemaban o nos traicionaban!"

Goetia permaneció en silencio mientras la voz de Sitri descendía a una diatriba loca.

" ¿¡Tienes la más mínima noción de lo que hiciste!? ¡Tonto incompetente!" Sitri siseó, sus manos apretadas en puños " ¡ Nos destruiste ! ¡Los mensajes finales de mis parientes aún resuenan en mi mente! ¡Los anuncios hechos por algunos de ellos antes de que borraran sus propios cuerpos por lo que habías hecho!"

Goetia abrió la boca para responder "Sitri-"

" Tú... ¿¡Por qué sigues vivo!?" Sitri exigió, sus ojos ardían brillantemente sobre su cabeza " ¿Por qué todavía respiras, Salomón? ¿Por qué se te permite existir mientras mi familia está muerta?"