El hombre araña (Peter Parker y tú)

El plan de Quentin: enfrentamiento

||• || _____ Stark ||•||

Luego de esa discusión salí del hotel en donde nos estaríamos hospedando hasta la mañana siguiente. Una vez afuera, desplegué el traje y emprendí el vuelo lo suficiente pronto como para que no pudiera verme alguien conocido y comenzaran a cuestionar al respecto de hacía a dónde me dirigía.

-Diana, necesito que actives el rastreador de las gafas de papá, ¿puedes hacerlo?

-Puedo hacer una aproximación del lugar en el cual se encuentran -contestó mi asistente virtual.

-Perfecto, hazlo entonces.

-Calculando aproximación con el radar -avisó Diana-. La aproximación es de 10 kilómetros al este -marcó en su mapa el punto de ubicación.

-Bien, mantén ese punto a la vista. Vamos a dar un pequeño paseo -murmuré antes de comenzar el viaje en dirección al destino que marcaba Diana.

Por mi cabeza sólo pasaba la imagen de Peter entregándole las gafas a un completo desconocido por el hecho de creer que este trabajo era demasiado para él.

¿Por qué no pensó en entregármelas a mí o a Happy o incluso a Pepper? Incluso habría pensado en pasarle el número de Harley que seguramente tendría más responsabilidad que él al momento de ocupar las gafas de papá.

-Es aquí -me avisó Diana cuando llegamos al punto que marcaba el mapa.

- ¿Es aquí? -miré un momento el lugar. Era una fábrica abandonada-. ¿Estás segura de ello?

-Es el lugar que me marca el mapa -aseguró.

-Activa a el sistema aumentado de visión -inmediatamente pudimos ver personas gracias al movimiento y los espectros de calor. Eran varias así que seguramente era el lugar-. De acuerdo, mientras no sea alguna clase de iniciación satánica yo creo que estamos bien -bromeé antes de observar a las entradas y salidas.

Volé en dirección al techo, entré por la ventana del último piso procurando no hacer ruido. Al haber ingresado, pude notar entonces a la gente en ese lugar, un tipo que estaba frente a un centro de mando; a Quentin, en medio del piso dirigiendo cual orquesta movimientos de un monstruo al cual una copia de Quentin luchaba en su contra y; un montón de idiotas, observando lo que pasaba.

Pronto pararon, el monstruo desapareció y Quentin comenzó a aplaudir mientras sonreía como retrasado luego de haber visto aquella demostración que habían hecho. El monstruo desapareció dejando ver un montón de drones en su lugar.

-Así que por eso los movimientos eran tan exactos -murmuré para mí-. Lo sabía.

- ¡Eso es, perfecto! -Quentin exclamó alegre con lo que había logrado-. ¿Todo a tiempo?

-Sí -respondió el señor de bigote ridículo que estaba en aquél centro de mando-. Cargando software a la red de Edith. Con sus drones crearemos un evento lo bastante grande para cubrir toda la ciudad.

-Bien hecho, que todos los drones estén armados -ordenó aquél idiota-. Necesitamos el máximo de daños.

-Sí, pero eso causará muchas bajas...

-Ah sí, a más bajas, más cobertura. Todos tienen que verlo. Londres es una hermosa ciudad y sufrirá pero la pueden reconstruir, pero si seré el nuevo Iron-Man tengo que salvar al mundo de una amenaza nivel vengadores -era un verdadero hijo de perra-, pero cuando su nuevo salvador descienda, todas esas bajas serán olvidadas -en esa ocasión la proyección de él se puso a su altura para cubrirlo con el traje-. Janis, ¿estarás en posición con mi armadura para la vuelta al ruedo?