El hombre araña (Peter Parker y tú)

Problemas: el monstruo de agua

Aviso: este capítulo tendrá Smut, así que ojito. Nomás avisando ando.

||•|| _____ Stark ||•||

Luego de hacer mis compras, salí de la tienda y busqué a Peter por el lugar. Me pareció extraño que no estuviera cerca, caminé unas cuadras buscándolo pero no había nadie.

— ¡S.J! —escuché a Brad y volteé a verlo—. Hola.

— ¿Has visto a Peter? Le dije que me esperara y no lo encuentro ahora —le comenté.

—Ah, sí. Se fue con Michelle hace como diez minutos, por allá —y señaló unas escaleras.

— ¿Con Michelle? —pregunté sin creerlo.

—Claro, los vi salir de una tienda e iban caminando muy cerca —eso me hizo sentir mal, no iba a negarlo.

Solo asentí antes de ver la hora.

—Deberíamos ir con el resto al museo Da Vinci —comenté.

—Claro, ¿necesitas ayuda con tus compras?

Accedí a su ayuda entregándole las bolsas con mis compras. Caminamos hasta el museo y una vez ahí, esperamos al resto. Miramos las puertas cerradas, a lo que nos acercamos a leer el anuncio.

—Genial —murmuré al notar la fecha de reapertura—, no estará abierto hasta nuevo aviso.

—Es una lástima, ¿no? Quería ir a verlo.

Lo miré pero no presté mucha atención a su comentario. Llamó mi atención la gente corriendo asustada a unos metros de nosotros. Algo iba mal, de eso estaba segura. Me alejé de Brad para acercarme al lugar de dónde venían ese par de personas corriendo para ver mejor qué sucedía, y al notarlo, me mantuve en silencio.

—No estás hablando en serio —murmuré.

||•|| Peter Parker ||•||

De la nada pareció que algo nadaba entre el agua haciéndola retirar un poco. Me pareció extraño pero de repente en el centro desapareció por unos segundos, sólo para después lanzar el agua hacia arriba como si una explosión dentro del agua hubiera ocurrido. Eso nos alarmó y gente comenzó a correr.

La canoa donde Ned y Betty iban con suerte se dirigió a la orilla, se vieron detenidos por una puerta, me acerqué rápido a ellos para auxiliarlos.

— ¡Betty, ¿estás bien?! —le pregunté ayudándola a salir de la canoa al igual que a Ned—. ¡Rápido, hay que irnos.

De pronto, un humanoide se creó del agua y lo vimos Ned y yo.

— ¿Qué es eso? —preguntó mi amigo alterado.

—N-no lo sé —respondí igual de asustado que él.

— ¿Qué vas a hacer?

—Dejé mi traje en el hotel.

— ¿Por qué?

— ¡Porque estoy de vacaciones, Ned. Todos me van a ver la cara, llévatelas de aquí! —le entregué las bolsas de mi novia y miré a Ned llevarse a las chicas lejos de la zona de riesgo.