Aunque no quieras cuidaré de ti

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Craig estaba esperando a Tweek fuera de la facultad de gastronomía, tenía planeado caminar juntos de regreso al dormitorio, comprar algún bocadillo en la tienda donde trabaja Kenny y continuar con su conversación de la tarde. Cuando finalmente la clase terminó y los alumnos comenzaron a salir del edificio, Craig visualizo al rubio y notó que el pequeño estaba un poco asustado, ya que en tanto se acercó a él, se aferró a su brazo y lo apretó con firmeza.

- ¿Te sucedió algo enano? – preguntó Craig tratando de captar la mirada del pequeño, sin embargo, Tweek mantuvo los ojos hacia el suelo.

- En... el cuarto... - susurró el rubio sin aflojar su agarre del más alto por lo que simplemente caminaron juntos, compraron algunas cosas y siguieron su rumbo a la habitación, durante todo el camino Tweek no mencionó ni una palabra más que sonidos ocasionales o pequeños asentimientos, el más alto no quiso interrogarlo porque lo más probable era que no se atreviera a decir algo por temor a que alguien más pudiera escuchar, en tanto llegaron, Craig arrojó las cosas sobre la cama e intentó ver a Tweek.

- Ahora bien... ¿Qué te pasó? Estuviste muy callado de regreso aquí – preguntó sin más rodeos acercándose al pequeño.

- Recibí... una amenaza anónima – dijo Tweek, quitándose el bolso sobre su hombro volcando su contenido sobre su cama, todos sus lápices estaban quebrados por la mitad – no sé en qué momento sucedió, supongo que fue cuando fui al baño o cuando me distraje con una compañera a la que estaba ayudando, no me di cuenta hasta que quise tomar un lápiz de mi estuche y noté que no estaba en mi pupitre, sino que estaba vacío en el suelo, me agache y revisé por si habían rodado pero no los vi así que me puse a buscar por otro lápiz en mi bolso, en cambio ahí dentro encontré regados todos los lápices que tenía en mi estuche, quebrados y la tinta... mancho muchas de mis cosas, por suerte tengo mis cuadernos forrados así que pude limpiarlos, y además... - Tweek le entregó una nota a Craig – esto era lo único que estaba dentro del estuche.

"Tu culo está igual de roto maldito puto, tienes que pagar."

- ¿Tu maestro no vio nada? – preguntó Craig frunciendo el ceño mientras veía la nota con desagrado, estaba arrugada y manchada con lápiz labial de diferentes colores y algo de la tinta, lucía bastante tenebroso el papel.

- No pregunté, pero siento que fue mi culpa, siempre me siento en la parte más alejada del salón, quizás es un lugar demasiado privilegiado para mí, no lo sé, de todos modos, estando allí es normal que nadie hubiera visto nada, mi salón de clases es bastante ruidoso por los utensilios así que es normal que nadie escuchara lo que estaba ocurriendo, pero... no creo que hayan sido mis compañeros de salón, ellos a veces me molestan... ¡pero no son gente mala! Algunos son muy amables conmigo...- dijo Tweek apretándose la punta de los dedos de la mano en una postura tímida.

- Espera... ¿Cómo está eso que a veces te molestan y dices que no son gente mala? – dijo Craig enojándose un poco, Tweek negó con la cabeza.

- No quise decir eso, digo, me empujan a veces porque soy pequeño y ellos son un poco torpes, en ocasiones tiran mis preparados o me pisan los pies cuando intento pasar, algunas veces se disculpan y otras no, así que yo no sé si lo hacen a propósito, además también son amables, me prestan sus notas de clase cuando estoy algo mal y en los trabajos grupales me invitan a participar con ellos, no me excluyen del todo... supongo que es lo normal entre compañeros de salón – Craig sintió como su enojo iba en aumento porque Tweek no estaba entendiendo mucho sobre su entorno, claro que no estaba bien ese tipo de comportamiento por parte de sus iguales.

- Enano eso no es normal, estas normalizando la violencia, no eres tan bajo como para que no te vean y te traten a empujones y mucho menos para que saboteen tu progreso en los preparados ¿Quiénes son los que están siendo rudos contigo? – le regañó Craig cerrando sus puños y arrugando la hoja de papel que tenía entre sus manos – según tú, si no fue alguien de tu salón ¿Quién más podría haberlo hecho? ¿tu profesor? No me vengas con tonterías, por supuesto que fueron de tu salón.

Monstruo de RopaWhere stories live. Discover now