Día de descansito

2.7K 262 343
                                    


A Craig le costó conciliar el sueño esa noche, estuvo rodando y girando en su cama durante un rato hasta que se quedó dormido. A la mañana siguiente unos pequeños sonidos comenzaron a sonar, se despertó al escuchar el roce de unas prendas y unas pisadas en el suelo de madera.

- Enano... ¿Qué crees que haces? – dijo Craig mientras se sentaba en su cama frotándose los ojos, viendo como Tweek comenzaba a vestirse.

- Ahhh yo... voy a ir a dejar mi justificante – dijo Tweek un poco nervioso, Craig se le quedo mirando con los ojos entrecerrados tratando de averiguar si lo que decía era verdad o no - ¡Es en serio! Sólo haré eso, por lo menos quiero ir a dejarlo yo mismo.

- De acuerdo, pero iré contigo – dijo Craig levantándose, era bastante temprano todavía, aún faltaba mucho tiempo antes que sonara su alarma. Sin pensarlo dos veces busco su toalla y ropa para luego dirigirse a los baños, decidió ducharse y vestirse ahí mismo para ahorrar tiempo. Justo cuando llegó al cuarto vio a Tweek a punto de irse sin él - ¿Por qué te estas marchando sin mí?

- Yo no... amm iba a reunirme con Chris, él está esperándome en la entrada y no quería hacerlo esperar, iba a traerlo aquí un momento o.... te iba a enviar un mensaje – dijo Tweek con algo de miedo, el más alto suspiró un poco al ver que no estaba tratando de escaparse.

- No tranquilo, vamos juntos, no se va a morir por esperarnos 2 minutos solo déjame ir por mi teléfono – dijo Craig entrando a la habitación, Tweek se quedó mirando su espalda un momento y volvió a entrar al cuarto cerrando la puerta tras él.

- ¿Enano? – preguntó confuso al ver a Tweek parado en frente de la puerta. Craig ya estaba listo para salir, había guardado su teléfono en su bolsillo, tenía su propio justificativo y traía su mochila que siempre carga por habito.

- Craig, ¿Puedo hacerte una pregunta? – dijo Tweek jugando con sus dedos un poco nervioso, parecía preocupado.

- Si, dime – se acercó Craig mirándolo estoicamente, Tweek alzo la cabeza y lo miró directamente a los ojos con un semblante muy serio. Se sentía como si el pequeño le perforara el corazón con la mirada.

- ¿Qué... es... lo que opinas de mí? – preguntó Tweek con timidez, luego bajó la mirada.

- ¿Qué opino sobre ti? ¿Respecto a qué? ¿A cómo eres? – preguntó Craig en respuesta, Tweek asintió tímidamente – Pues... pienso que eres una persona genial, me agradas, eres simpático, atento, habilidoso... aunque a veces me desesperas... sobre todo cuando se trata de tu enfermedad y tus extrañas paranoias.

- Ya veo... – Tweek se obligó a sonreír con un nudo en la garganta, disimulando perfectamente sus emociones frente a Craig, pero realmente se sentía un tanto herido por su respuesta – ¿Crees que algún día... alguien pueda quererme, así como soy? ¿Quererme de verdad?

Craig se sorprendió por la pregunta y se ruborizó inevitablemente pues no sabía si Tweek quería una confesión suya o si simplemente lo preguntaba por las intenciones que tenía Christopher con él, titubeo un poco antes de responder.

- Ammm, ehh, ¿Qué pregunta es esa? ¡Por supuesto que sí enano! – dijo Craig, su voz sonaba un poco "falsa" para Tweek, pero era confuso más que nada por su tono, no sabía cómo disimular o si era necesario hacerlo, pero entendió que le había respondido por simple compromiso o amabilidad y no por sinceridad.

- Supuse que dirías algo así, gracias Craig – dijo Tweek con una sonrisa, abriendo la puerta detrás de él, dándole la espalda al pelinegro – Olvida lo que te dije, vamos, Chris nos está esperando.

Craig no sabía si había dicho la respuesta correcta o sí Tweek lo había malinterpretado, pero esa reacción fue claramente sospechosa por lo que rápidamente cerró la puerta y fue detrás de él. Se apresuró en acercarse a Tweek, pero cada vez que se acercaba este aceleraba su paso. Craig realmente no entendía por qué el pequeño había tomado esa actitud, pero quería dejarle en claro que hablaba en serio y que no estaba bromeando. Cuando finalmente logro ponerse a su lado ya habían llegado a la entrada de los dormitorios donde se encontraba Christopher esperando. Craig no pudo hacer otra cosa más que callarse por vergüenza.

Monstruo de RopaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora