Monstruo de Ropa

¿hijito?

Era temprano y Tweek había terminado de realizar las compras para preparar comida tal cual lo había prometido la semana pasada. Los laboratorios de cocina estaban abiertos, algunos alumnos se encontraban cocinando, y otros estaban acompañados por chicos que no pertenecían a la facultad.

Tweek se acercó a una mesa libre y comenzó a lavar sus ingredientes, tenía toda la intención de dejar preparada la comida mientras Craig dormía, luego irían juntos a la lavandería e inmediatamente comerían viendo la maratón prometida de RedRacer hasta morir.

- Hola amiguito – lo saludó una chica rubia, mientras arrastraba una silla y se sentaba – Ayer no pude probar tu platillo luego del discurso de Kenny, ya que recibí una llamada de un amigo que está en la otra sección, diciendo que se sentía algo mareado por el exceso de calor en estas salas durante sus clases, pero, aproveché de venir ahora que te vi entrar por casualidad... en fin ¿Vas a preparar lo mismo? ¿Puedo probarlo hoy?

- Ah... eh... - vaciló Tweek sin ver a la chica directamente, trató de repasar lo que dijo ella en su cabeza para poder responder sin hacer contacto visual ni parecer un idiota – No, no voy a preparar ese platillo, voy a cocinar para mi compañero de cuarto y para mí, pero si quieres puedo darte a probar, de todos modos, todo lo que hago suele ser experimental... - Tweek la miró por el rabillo del ojo.

- ¡Yupi! ¡Gracias!, mi nombre es Barbara Stevens, pero todos me dicen Bebe ¿Y tú, cómo te llamas? – antes de que responder, Tweek se volteó para ver bien a la chica, esos grandes ojos pardos y esa cabellera rizada, sin duda era la misma Bebe Stevens que conoció en cuarto grado, convertida en una dama en todo su esplendor, su mandíbula se trabó y no pudo ni balbucear una respuesta.

- Hola Tweek, ¿Qué hay Bebe? – llegó Kenny sentándose al lado de la rubia para luego ponerse a balancear sus piernas – Te vi cuando venía a mi trabajo y dije uff, 5 minutos de retraso no es como un embarazo, así que me daré el lujo de llegar un poco tarde a la tienda hoy.

- ¿Tweek? – repitió la chica mirando fijamente al rubio que no se había quitado todas sus capas de ropa, simplemente había remangado con fuerza sus brazos lo suficiente para no mojarlos al lavar las verduras y que no le estorbaran para cocinar – No puede ser... ¿Eres Tweek el ex novio de Craig? ¡Oh dios mío! No te reconocí sin esas ojeras y con esa.... Tweek ¿Qué clase de disfraz es ese?

- ¡Chicos! Por favor – Tweek intentó silenciarlos, apretó con fuerza los ojos retuvo el aliento y suspiró – Se los suplico, no digan mi nombre en voz alta, menos frente a Craig, él no sabe que soy yo y es mi compañero de cuarto... y... ¿Cómo te enteraste Kenny?

- Tu maestro me dijo tu nombre ayer – Kenny sacó la lengua como si se tratara de una travesura infantil, Tweek aplastó su palma contra su cara – Oye... relájate, somos amigos ¿No? Eres el "No Kenny"

- Y tú fuiste el "No Tweek" de Craig – se burló Bebé.

- ¿Qué? – Tweek se quedó paralizado un momento y luego agitó sus ideas volviendo a ellos- Ah... chicos esto es muy raro, por favor no le digan a nadie más que soy yo, mucho menos permitan que Craig se entere, no quiero ¿Sí?

- Mmm... demasiado tarde... - dijo Kenny – Anoche les conté a los chicos, bueno, en realidad solo a Kyle y a Stan, ya que vivimos en el mismo departamento junto con mi hermanita Karen. Les comenté que estudias aquí y prometieron venir el próximo viernes conmigo a tus degustaciones y saludar.

- Oh no, maldición no... esto es demasiada presión... - Tweek se frotaba nerviosamente las manos – Está bien, está bien, no puedo explicarlo con detalles, pero, por favor, no permitan que Craig se dé cuenta.