Monstruo de Ropa

Enfermito

- Uuuh... ayuda...- un murmullo se escuchaba desde alguno de los cuartos de la casa, esto hizo que Craig abriera sus ojos y lo primero que vio fue una abundante cabellera rubia con rico aroma a shampoo.

- Mierda... - se quejó el pelinegro mientras se sentaba, miró molesto el reloj del equipo de música de Token, eran las 11:30 de la mañana y Tweek permanecía durmiendo igual que anoche.

- Ayuuuuudaa... – se volvió a escuchar, esta vez Craig pudo reconocer la voz, era Clyde. Lentamente, se levantó de su lugar con cuidado de no despertar al rubio, y notó que las cobijas se habían deslizado hacia abajo, antes de irse tapó bien al rubio, mientras recordaba que lo abrazó toda la noche y entonces notó que éste no parecía tener frío.

- ¿Están bien? – preguntó al tocar la puerta, se escuchó a alguien moverse desde el otro lado y Bebe abrió, tenía una cara irreconocible y poco glamorosa, se veía muy pálida y sus ojos estaban hinchados.

- Necesito usar el baño... - susurró y pasó junto a Craig, Clyde estaba en la cama con el cesto de basura del baño a los pies de la cama, estaba vomitando, incluso había manchado un poco las sábanas de Token.

- Ayuda... - volvió a pedir casi llorando.

- ¿Agua? – consultó Craig desde el marco de la puerta.

- Lo que sea... no puedo ni con mi alma... me palpita la cabeza... - el pelinegro suspiró y fue al cuarto de los anfitriones, tocó suavemente y escuchó un quejido desde el otro lado.

- Abre... – murmuró Token, Craig abrió y vio a Nichole acostada boca abajo con un pie tocando el suelo, Token por su parte, estaba sentado en la cama sujetándose la cabeza, ambos traían la misma ropa de anoche – ¿Nos traes algo de agua? Y un paracetamol del botiquín del baño...

- ¿Le doy a todos? – preguntó el de ojos verdes, el moreno asintió.

- ¿Tú no te sientes mal? – preguntó el afroamericano.

- Sólo estoy cansado, como si me faltara algo de sueño, pero me siento muy incómodo como para dormir... aunque definitivamente ustedes están peor... - se excusó, realmente si quería dormir y mandarlos al diablo, pero no quería hacerlo junto al rubio, mucho menos si este recordaba algo de lo que había ocurrido durante la noche.

- Supongo que es porque eres de un tamaño superior a nosotros y la intoxicación te afecta un poco menos, eso... o tu hígado es un dios todo poderoso... - explicó Token quitándose el sudor de la frente mientras se recostaba sobre el respaldo de su cama para agonizar otro rato. Craig hizo lo que le pidieron, atendió a los moribundos sin quejarse, pero le inquietaba algo, el enano no se levantaba ni se movía, y siempre que pasaba a su lado intentaba picarlo con el dedo o moverlo, pero este no se despertaba.

- ¿Cómo están los demás? -preguntó Token mientras se bebía el vaso con agua como si no hubiera bebido nada en días.

- Um... veamos... Clyde te vomitó la cama de huéspedes... Bebe está en estado de recuperación zombie, y... - Craig hizo una pausa y luego miró a Token – Creo que es mejor que vengas a ver a mi compañero... no se ha despertado y aunque no bebió como nosotros... me preocupa, porque no se mueve... ni hace nada... sé que no esta muerto porque respira... pero ya sabes, él no es un vago como yo.

Inmediatamente Token se alertó, él también sabía que el rubio era madrugador y de la ronda de tragos no bebió más de 4 vasos pequeños de tragos fuertes, en comparación con los demás, salió bastante victorioso en todo.

El moreno dejó a Nichole durmiendo y siguió a Craig hasta el sofá cama. Lo primero que hizo fue tomarle el pulso a Tweek. Su pulso era inusualmente bajo, intento moverlo para despertarlo, pero este no respondía, ni siquiera sus cejas se agitaban ante los movimientos, realmente parecía sedado.