Capítulo N° 30 | parte 2

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Luego de que unas horas después poco a poco todos comenzaran a irse, Erica decidió darle un baño a Jack antes de acostarlo a dormir, solo luego de asegurarse de que estaba dormido y Hund se acurrucó a su lado, fue que bajó las escaleras del sótano en busca del Loco. Allí se oía música de jazz, y lo encontró parado frente a esa pared donde había fotos familiares y muebles con recuerdos de su niñez.

—¿Recordás cuando dije que lo había superado? —dijo él en un susurro, sin dejar de mirar la foto de sus padres—. Mentí, jamás lo superé, jamás pude olvidar ese momento…

—Se veían muy enamorados, parecen… tan distintos entre sí —dijo al ver el cuadro, que transmitía todo el amor que se tenían.

—¿Te interesa la historia? —La miró con una sonrisa triste, ella asintió con una sonrisa, por lo que él suspiró al comenzar a hablar—: Mi padre era un soldado alemán recién llegado a Argentina. Al igual que mis tíos era cruel, sádico e insensible, especializado en torturas. Fue rápidamente admirado por todos, se convirtió en el mejor de Mörder junto a mi tía y su esposo, al punto que Jonathan le permitió darle el nombre a la sede. Mi madre era joven, una novata que había perdido todo, casa, familia, amigos… no tenía nada. Ella era como vos —La miró con una sonrisa—, ingenua, dulce y romántica, era… buena, demasiado pura para Mörder, pero también muy talentosa como asesina.

—¿Tu padre se enamoró de ella por eso? —lo miró bastante interesada en la historia, pero él comenzó a reírse.

—No, ¡mi padre la odiaba por eso! Él era una persona que seguro odiarías, no tenía nada de bondad en él, despreciaba a mi madre porque decía que era «estúpida». Pero un día, recorriendo los pasillos de Mörder junto a mi tía, oyeron una hermosa voz que llamó su atención, se asomaron por la puerta viendo a mi mamá cantar —sonrió al recordar la historia—. Mi tía me dijo que al verla murmuró «engel» y que sus ojos se iluminaron de una forma que jamás había visto. Después de eso mi papá se interesó en ella, la llevó a un bar de jazz donde la hizo subirse al escenario y cantar, y él la admiró desde el público. Después… Bueno, se casaron, nací yo e intentaron darme una infancia normal mientras pudieron.

Él se quedó en silencio por un rato, con la mirada baja, y Erica respetó su silencio, sin presionar.

—Soy el único nacido en Mörder que por cinco años fue un niño normal —dijo en un susurro—, el único que jugaba con juguetes en vez de practicar pelea, como es el caso de Gretchen o Rata, por ejemplo. Fui un niño normal mientras estuvieron vivos... Y eso... era un rasgo de debilidad para Jonathan, que comenzó a ver a mi madre como un virus, y a mi padre como alguien debilitado.

—Debió ser muy duro para vos...

—Lo fue, porque quedé a cargo de mis tíos que no eran nada parecidos a ellos, no me trataban bien —admitió con tristeza—. Una semana después de sus muertes Jonathan le consiguió un reemplazo a mi padre. Adoptó a Nahuel, era su proyecto de convertirlo en alguien mejor que mi padre, pero sin sentir amor. Y lo logró, el Gusano es mejor asesino de lo que fue mi papá, porque es un bastardo sin sentimientos.

—Excepto si se trata de Gretchen —acotó Erica.

—Excepto con Gretchen... —dijo con un suspiro y la miró de reojo—, en esa época Nahui y yo nos habíamos hecho amigos, ambos habíamos quedado huérfanos casi al mismo tiempo y éramos obligados a fingir que nuestros padres nunca existieron, pero con el tiempo él se volvió como los Moms y me quedé solo otra vez.

—¿Nunca tuviste amigos? —preguntó Erica con un gesto triste—. ¿Ni de niño?

—Fui amigo de Nahui hasta que él tuvo su primera misión, luego nos alejamos —explicó y se alejó de ahí para poder tomar la botella de vino y servirse un poco—, fui amigo de Héctor hasta los quince años, más o menos, porque fui yo el que cambió y dejé de caerle bien. Tampoco me llevaba bien con Kellen así que siempre estuve solo.

Mörder [ COMPLETA ]Where stories live. Discover now