31 - Siempre en la misma página 🔞

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Departamento de Jimin, tres y veinte de la mañana, Jimin y Jungkook besándose de forma desesperada. Changbin los había sacado del bar a ellos primero, por petición del modelo por supuesto, cuando ya no podían sacarse las manos de encima.

Jungkook fue muy específico con sus órdenes; Chan debía llevar a casa sano y salvo a Soobin y Changbin Beomgyu, lo mejor era no meterlos en un mismo auto, porque ni siquiera se habían mirado en toda la noche. Las cosas seguían muy tensas entre ellos. También le encargó a Félix y Hyunjin que estuvieran pendientes de sus hermanos menores, porque no iba a regresar a casa en varias horas...

Más bien en toda la madrugada.

Tenía sentido, porque la parejita se estaba besando contra la puerta del departamento de Jimin como si ya no pudieran soportarlo por más tiempo.

—Debo saludar a Makki —dijo apoyando la tarjeta para que pudieran entrar, de inmediato la perra se acercó a ellos—. Hola bonita —dijo, acariciándola para luego darle un abrazo—. No quise despertarte, lo siento.

Mientras Jimin se encargaba de ella, Jungkook cerró la puerta y encendió las luces. No quería esperar más, pero sabía que no debía entrometerse entre Makki y su amo, nunca... jamás, bajo ninguna circunstancia, por lo que, se mantuvo detrás de Jimin y acarició a Makki cuando esta se acercó a él para olerlo.

Jimin le había dicho que no necesitaba pedirle permiso para tocarla si no tenía el arnés, así que cada vez que Jungkook llegaba, se saludaban con caricias y lengüetazos en la mano por parte de ella, poco a poco, Makki iba confiando más en Jungkook y eso se notaba.

¡Jimin por fin le dijo que se fuera a la cama! Y ella, siempre obediente con su amo, lo hizo sin dar más vueltas. Se acostó en la cama de perro que estaba ubicada en la sala y antes de que pudiera decir algo al respecto, Jimin lo tomó de la muñeca para estirarlo a su habitación.

Sus besos y la forma en la que se tocaban eran suficientes para entender dónde iban a parar. Jimin se aseguró de llevar a Jungkook hasta el borde de la cama, para finalmente empujarlo y que cayera sobre esta. Terrible hubiera sido si lo empujaba antes de tiempo y caía al suelo, pero el profesor conocía muy bien su ambiente.

—Dejé de beber porque quiero recordar esto mañana —dijo Jimin subiendo sobre Jungkook, este lo ayudó, sujetándolo de la cintura para acomodarlo mejor.

Apoyó sus manos sobre el pecho de Jungkook, podía sentir el latido de su corazón y cómo su ropa se pegaba un poco a su cuerpo por el sudor. Estaba caliente, justo como Jimin, también sentía el sudor bajando por su cuello. Era sencillo recordar la noche anterior, cuando se encontraban en las mismas condiciones, pero ahora, ambos pretendían llegar más lejos.

—Me encantas... —dijo Jungkook apretando su trasero con ambas manos, Jimin se removió sobre él y no demoró en soltar un jadeo por la presión—. Eres tan hermoso...

Jimin se inclinó sobre él para poder besarlo y mientras lo hacía, se encargó de desabrochar los botones de la camisa de Jungkook, estaba siendo bastante torpe, tenía que reconocerlo, pero sentía que su cuerpo temblaba sobre el más alto, estaba ansioso, no quería esperar un segundo más para tocar su cuerpo sin ropa de por medio, así que cuando consiguió desprender toda la camisa, la abrió con sus manos para finalmente acariciar su pecho.

La noche anterior todo fue rápido, improvisado y un poco desesperado, así que esta vez quería tomarse su tiempo. Jimin dejó de besarlo solo para concentrarse en tocar, necesitaba hacerlo, necesitaba conocer cómo era el cuerpo de Jungkook, hasta el último detalle, y el otro lo permitió, dejó que Jimin hiciera lo que quisiera con sus manos sobre él, se levantó solo un poco para lograr quitarse la camisa y arrojarla a alguna parte de la habitación para que dejara de molestar.

Look at me || KOOKMINWhere stories live. Discover now