54 - Soberbio

339 44 27
                                    

Jimin despertó muy temprano al día siguiente, a pesar de que Jungkook lo tuvo despierto hasta la una de la mañana. Le costó quitarse las suaves y cómodas sábanas de encima y más aún porque su novio a su lado, intentó detenerlo diciéndole que era muy temprano aún.

—Tengo que estar en la universidad a las seis y media —murmuró, dirigiéndose al baño—. Hoy salen los resultados.

Jungkook abrió los ojos, levantando la mitad de su cuerpo y apoyándose por sus codos para mirar a su novio, ya estaba dentro del baño, pero había dejado la puerta abierta.

—Es verdad... —Jimin tiró la cadena y pasó al lavamanos—. ¿Cómo se dan los resultados?

—Se publica una lista con los nombres de los aprobados, ordenada de mayor a menor puntaje en la plataforma de la universidad —dijo—. También se imprime y se coloca en los pizarrones de avisos que están distribuídos por el campus, hay setenta cupos disponibles, pero siempre se pueden agregar más si los resultados son muy ajustados.

El silencio se hizo presente entre ellos, se podría decir que fue porque Jimin se estaba lavando los dientes y haciendo su rutina de limpieza facial matutina, pero antes, eso nunca les impidió seguir conversando, ahora sentían una presión en el vientre, consecuencia del horrible pensamiento efímero de que Beomgyu no haya ingresado como tanto esperaban.

Jimin más que todos.

Él era músico, él era profesor, su profesor, él había escuchado su audición... tenía que estar en esa lista.

«»

Jimin llegó a la universidad a las seis con cuarenta y ocho de la mañana, la lista impresa ya estababa disponible, por ese motivo quería llegar temprano, no quería esperar a que lo subieran a la plataforma.

Yunho estaba con él, en la secretaría del departamento de música, Wooyoung llegaba a las siete en punto, así que pudieron esperar unos minutos más, ¿pero por qué esperar si podían tener los resultados ya?

—Lo encontré —dijo Yunho luego abrir un par de carpetas—. ¿Seguro que podemos estar aquí?

—Soy profesor de la carrera, sí podemos, deja de hacer preguntas y lee la maldita lista —murmuró, estirando un poco el arnés de Dudu—. Lo siento...

Yunho suspiró, dando la primera ojeada rápida.

—Vaya... admitieron solo cincuenta y dos postulantes...

Jimin se tensó.

—¿Qué? El cupo es mayor, —dijo—. ¿No hay otra lista?

—No, todas tienen la misma cantidad —respondio buscando entre las demás copias, Jimin mordisqueó sus labios—. Déjame ver... el puntaje más alto es de noventa y ocho, pero no es Beom...

—Dime en qué puesto ingresó, ¿quieres matarme acaso?

Yunho pasó los ojos por la lista por tercera vez, creyendo que esto se trataba de un error por culpa del sueño y que Jimin no le haya dejado terminarse su café con tranquilidad. Yunho apretó la hoja entre sus manos arrugando un poco los bordes, volviendo a leer del uno al cincuenta y dos, una y otra vez.

—¿Y bien? ¿En qué puesto ingresó?

Yunho dejó la carpeta sobre el escritorio y miró a su mejor amigo, podía ver cómo le temblaba el labio y cómo apretaba de más el arnés de su compañero.

—Yun...

—No está en la lista —dijo entonces, sintiendo demasiado calor de pronto—. Beomgyu no... no ingresó.

Look at me || KOOKMINWhere stories live. Discover now