FOURTEEN

435 39 9
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.




ME PARÉ DE LA CAMA Y CAMINÉ HASTA EL PLACARD DESCONOCIDO, tomé la primera camiseta que ví y me la puse para salir al salón del departamento, tenía el piso calefaccionado por lo que ni me molesté en calzarme.

Mi acompañante de anoche cuyo nombre no recordaba me rodeó la cintura con la manos y me besó, era suave pero demandante.

- Voy a salir unas horas, tengo que hacer unos trámites y después vengo.- Dijo, bajando los besos por mi mandíbula hasta mi cuello, estiré la cabeza hacia atrás para dejarle espacio.

- En unos minutos me voy, tengo que ir a recoger a una amiga.- Mentí, la verdad es que no quería quedarme sola en su casa. El asintió y me dió un último beso antes de dejarme ir.

- Te sabes la clave, ponla cuando salgas.- Asentí con la cabeza y el desapareció de mi vista, no me relajé hasta que escuché el "pipipipi" de la puerta indicando que se había marchado.

Con toda la calma del mundo me dirigí a la cocina y agarré mi teléfono de la isla, caminé hasta el gran ventanal que tenía en el salón y me senté en un huevito, hecha bolita.
Desbloqueé el teléfono, tenía dos llamadas perdidas de Andrea y cinco mensajes de Ignacio, llamé primero a mi rubia.

No hizo ni dos tonos hasta que atendió.- Dónde coño te habías metido, hija del diablo.- Reí a carcajadas mientras acomodaba la cámara para que me viera.

- El diablo me secuestró anoche.- Y de manera disimulada le mostré mi cuello, dónde se podían ver marcas de dedos y algún que otro chupón.

- Pero que era un hombre o una sanguijuela...- Abrió los ojos de par en par.- No te va a dar tanta gracia cuando te tengan que tapar las marcas con Photoshop y esas mierdas.-

Cierto era, Nacho me habría matado si tuviese alguna campaña pronto. Me hice la angustiada.- Me van a bajar el sueldo.- Una cabecita apareció detrás de Andrea, era Lucio.

- Que guarra eres tía, escuchamos todos, no te tenía así.- Rodeé los ojos.

- Ya sabía que no la pones ni en remojo igual, no hacía falta la aclaración.-- Se escucharon risas de fondo.- Me gustaría que cuando hay más de un oyente me avisen si puede ser.

- No ha habido tiempo.- Escuché una voz de fondo que no pude reconocer, Andrea se tensó.

- Pero si hay tiempo para hacerme slut shaming.- Me reí.- Nada Drea, te llamaba para avisarte que estoy viva, solo que sin voz.-

- Y me lo restriega en la cara la muy guarra.--Se hizo la indignada.

- Pero de cantar toda la noche en el bar, que te creés.- Me pasé las manos por la cara y me levanté hasta el dormitorio de mi compañía para vestirme, iba a llevarme una de sus remera como recuerdo, al final terminaba siendo una costumbre.

REFLECTIONS | Misho AmoliWhere stories live. Discover now