YO SOY EL PADRE DEL VILLANO

Capitulo 189

— Habla con él y mantenlo colgado. No lo rechaces fácilmente, pero tampoco estés de acuerdo con demasiada facilidad— respondió Ji Yuxiao.

— Está bien— estuvo de acuerdo Zhao Cheng.

Instruyó a Huang Xin y Huang Xin estaba un poco desconcertado. ¿Qué quiso decir con poder hablar?

Entonces, de hecho, ¿Todavía estaba dispuesto a cooperar con el Grupo Ji?

¿Simplemente no quería firmar con Ji Mu?

¿Por qué?

Le preguntó tentativamente a Zhao Cheng y Zhao Cheng simplemente dijo: — No tienes que preocuparte por esto. Hazlo.

Huang Xin no siguió haciendo preguntas e hizo lo que dijo Zhao Cheng.

Después de hablar durante casi medio mes, el lado de Tan Jiaji dio todo lo que podía ser rentable y se dieron todos los beneficios que se podían dar. Zhao Cheng lo soltó y estaba dispuesto a firmar un contrato con él.

Tan Jiaji estaba extasiado y mencionó esto en la reunión regular de la compañía al día siguiente. — Aceleraré la comunicación con Aoyu esta semana y me esforzaré por llegar a una cooperación con Aoyu dentro de la semana.

La expresión de Ji Mu cambió inmediatamente en el momento en que dijo esto.

Ji Zhengao se rió. — Impresionante, Jiaji. De hecho, tiene una manera de tratar con los clientes que nuestro Grupo Ji no puede ganar. Es realmente aterrador"

Tan Jiaji dijo con una sonrisa: — Me estás elogiando en exceso.

— Quiero decir que si Jiaji tiene tanta habilidad, es demasiado desperdicio ser el subgerente del departamento de ventas. Si realmente puedes lograr esto con Aoyu, debes ser promovido.

Su intención al decir esto era obvia. El padre de Ji Mu, Ji Zhenyang, dijo de inmediato:— ¿Por qué? ¿El subgerente Tan no está satisfecho con su posición actual?

—No es que esté insatisfecho. Es solo que la gente va a lugares altos y el agua fluye a lugares bajos. Cuando el Señor Ji me habló, mencionó al gerente general. Pero en ese momento, todos no confiaban en mi habilidad. Ahora que se ha confirmado mi habilidad, naturalmente espero obtener el peso adecuado en la empresa.

Tan Jiaji no se desanimó y no refrenó su ambición en lo más mínimo.—Por lo tanto, naturalmente espero que mi posición pueda ser promovido.

Sus palabras fueron tan francas y razonables que Ji Zhenyang no supo qué decir.

En el momento crítico, Ji Zhenhong dijo: —Está bien, está bien. El contrato aún no se ha firmado. Todo se puede decir después de la firma del contrato. Xiao Tan, tienes una buena habilidad y estás dedicado a la empresa. La empresa lo sabe y definitivamente no le haremos daño. Usted puede descansar seguro.

—El presidente Ji lo dijo. Estoy naturalmente aliviado.— Tan Jiaji se rió.

Después de la reunión regular, Ji Mu y Ji Zhenyang estaban de mal humor.

En el momento en que regresaron a la oficina de Ji Mu, Ji Zhenyang no pudo evitar decir:—Tu tercer tío está realmente inquieto. Había tanta gente que no podía esperar para pedir crédito por Tan Jiaji. ¿No es porque no está satisfecho con que usted ocupe el puesto de gerente general, por lo que quiere que Tan Jiaji tome el puesto? ¡Está pensando demasiado bien!

Ji Mu frunció el ceño, siempre sintiendo que las cosas no eran tan simples.

Aoyu sabía que quería cooperar con ellos y habló con ellos antes. Entonces, al final, lo rechazaron. Ahora estaban dispuestos a firmar un contrato con Tan Jiaji. ¿Que esta pasando? ¿Estaban bromeando con él?