Capitulo XXVIII

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Pasaron un par de horas hasta que Adrien salió con lágrimas en los ojos. Se notaba a kilómetros lo feliz que estaba, lo abracé felicitándole y me repetía al oído "Es hermosa, es una pequeña niña" a lo que yo sonreía. Me sentía parte de la familia.

—Se llama Cessy, se parece tanto a Alexia. De verdad, nunca había visto a un bebé tan bello como ella —se separa de mí para abrazar al ojimiel, este lo felicita-. Podemos entrar en un rato más, está agotada y al bebé tienen que limpiarlo.

—Me imagino, con este tipo de cosas que me cuentan ya se me van todas las ganas de tener hijos —río, Justin me aprieta la cintura en desacuerdo con mi idea.

—Bueno, me encantaría tener tres o cuatro hijos pero aquí con la confianza, quizá salga embarazada y después me deje, me denuncie solo para sacarme dinero —me envía una indirecta con lo primero que articula.

—Pues, deberías irte buscando una mujer que te quiera dar esos hijos porque ustedes no son los que sufren el parto —le golpeo el brazo nerviosa, eso sonó demasiado directo.

—Cálmense, ninguno de ustedes tendrá que soportar al otro así que siéntense, voy a ver cómo van las cosas allí adentro —se dio media vuelta dejándonos solos, nos ubicamos en los asientos de la primera fila.

— ¿Eres estúpido o te haces? No puedes andar haciendo ese tipo de propuestas enfrente de Adrien ¡una de las personas que creó el contrato! —me enojo.

—Lo siento, es que no me quiero imaginar ser una familia sin hijos, sería horrible —besa mi cuello, me estremezco.

—En cualquier momento saldrá Adrien —advierto.

—A veces te pones tan insoportable —habla en susurro—, pero así te quiero.

—Justin, basta —lo miro—. Yo igual te quiero —confesé—, aquí hay demasiada gente.

Esperamos hasta que pudimos entrar a ver al bebé y a Alexia. Se veía muy cansada, aún tenía unos pelos pegados a la frente, a pesar de aquello, tenía a su pequeña niña en brazos y sonreía. Era tan tierna la escena.

Nos mantuvimos conversando unos minutos, sostuvimos a la pequeña Cessy hasta que se la llevaron para hacer los últimos chequeos médicos, Alexia debía dormir. Ambos nos despedimos, mi manager seguramente se quedaría allí la noche completa cuidando de la nueva integrante y su esposa. Justin me llevaría a casa, quizá iríamos a su casa pero eso era lo que menos me importaba en estos momentos. Mi tobillo seguía doliendo, necesitaba ayuda para caminar.

Con mi brazo derecho rodeando el cuello de Justin, salimos del hospital. Los camarógrafos habían llegado hasta aquí e impedían nuestra salida.

Con los labios sellados intentando contenerme, con dificultad llegamos al auto.

Íbamos en silencio y la radio iba a un volumen sorprendentemente bajo.

(***)

Desperté junto a Justin a mi lado, y la verdad, no tenía idea de que había dormido con él hasta ahora. Están desordenado, su cabello hacia arriba, una pierna fuera y otra dentro de la sábana. Apenas me tapaba yo con ellas.

Vi la hora, aún quedaban dos para ir al médico. Intenté ponerme de pie pero el dolor se había intensificado, un gemido salió de mis labios; mi compañero de cama despertó.

— ¿Qué anda mal, princesa? —su voz estaba ronca y sus ojos achinados acostumbrándose a la luz del día.

—Mi tobillo —evité las lágrimas lo más que pude, aún así, mis ojos estaban aguados.

—Mierda, lo había olvidado. Si querías levantarme, tenías que solo moverme un poco para despertar, pedir ayuda —se paró apresurado en ayudarme—. ¿Dónde quieres ir?

—Al baño, me dejas en la puerta, puedo apoyarme en algo —susurré avergonzada.

Hizo lo que le pedí y con algo de dificultad pude movilizarme por el baño. ¿Lo peor? El baño era grande.

El agua corría llenando la tina, ya que me es imposible usar la ducha por mucho tiempo con una fractura o lo que sea que haya sucedido con mi pie.

Demoré una media hora, entonces me di cuenta de que mi ropa —de unos de los días que me quedé aquí— estaba en otra habitación.

Envolví la toalla por encima de mis pechos haciéndola caer como un vestido recto hasta debajo de mis muslos. Sería una situación bastante incómoda salir a pedirle a Justin que vaya por mis prendas, también hay ropa interior entre ellas.

—Mm... —Murmuré al abrir la puerta—. Te tengo que pedir un favor —volteó observándome de pies a cabeza—. Me da un poco de vergüenza pero eres mi única salvación por mi accidente —mis mejillas ardían, lo más probable es que estoy roja—, necesito mi ropa que dejé aquí.

Estaba apenada por tener que pedir aquello. Su mirada no se despegó de mí hasta que finalicé mis palabras. Se acercó y me dio algo de miedo que hiciera algo indebido pero se acercó para que yo llegara a la cama.

Salió de la habitación y verifiqué mi móvil. Abrí la aplicación de Twitter, respondí unos tweets pero algo llamó mi atención.

Había mucha gente hablando sobre nuestra noche de ayer, a pesar de que fuéramos al hospital, ellos hablaban de un beso.

Bajé por mis menciones con miedo de encontrarme fotos que pudieran perjudicarme.

Y se cumplió, mucha gente ponía enlaces. Abrí el primero que encontré, comencé a leer el artículo:

Ayer por la noche Justin Bieber y Amanda Sawyer salieron a celebrar la noticia del nuevo tour de Amy, que por cierto, ellos no han confirmado nada, son solo rumores.

Estuvimos observándolos durante toda la noche desde que salieron de la casa del manager de la nueva artista. Lo que nos sorprendió fue que el chico problemático tuvo una demostración muy cariñosa con la chica. Le besó la mano antes de abrirle la puerta del Ferrari.

[Foto]

También nos pareció extraño que salieran tan temprano del restaurante donde habían hecho reserva. No éramos los únicos que buscaban respuesta sobre la cita de estos dos muchachos, y Amanda salió dañada del tobillo, él no dudó en tomarla de la cintura y brindarle ayuda a la castaña.

Aquí viene lo interesante, una vez ambos dentro del vehículo de Justin, se veían muy cerca. Podríamos decir que estaban a punto de besarse:

Debajo de eso aparecían tres imágenes de nosotros cuando él intentó tranquilizarme por lo del tobillos.

Y así fue, tenemos las mejores capturas del beso de dos chicos de la industria de la música.

[Foto]

¿Será que Justin Bieber dejó de lado las fiestas y las chicas por la nueva imagen de la disquera donde ambos firman?

Estaba en shock, me era difícil analizar lo que estaba viendo, ellos nos han pillado.

Sus fans me querrán matar, al igual que mis jefes.

******

Volví, no pensaba hacerlo hasta la otra semana pero voy a cambiar de móvil y estaré dos o tres días sin donde escribir.

Espero que les guste, voy a seguir escribiendo.

Los amoooo

I can see the storm © j.b.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora