I can see the storm © j.b.

Epilogo

Estoy deprimida ¿para qué mentir? El concierto comienza en apenas unos minutos y con Justin he intentado disfrutar lo más que puedo. Ambos cambiamos después de la noticia de Adrien, aunque seguía cuestionándome sobre la decisión que tomaría; soy muy indecisa y al final siempre la cago por mis elecciones. La vida me ha ayudado a aprender lo que es bueno y lo que es malo, pero en estos momentos no hay diferencia, uno de los dos tienen que salir herido pero sé que es uno solo el que se puede remediar.

Luché tanto por lo que quería que ahora siento que ya lo pierdo, para siempre.

La audiencia era masiva y sus gritos eran los más fuertes que había escuchado en mi vida, pero eso ya no me alentaba. Lo único que quería era que siguiera aquí, aún tenía horas para pensar, el tiempo se va volando y cuando ya esté terminando el concierto recién me daré cuenta de que debo dar una respuesta.

Una lágrima solitaria se escapa de mis ojos mientras me maquillan. Se dan cuenta y me obligan a calmarme, debo estar perfecta; la gente de ahí afuera me espera.

Acá la prensa es tranquila, ni comprada con el resto del mundo. Pude salir a dar un paseo al cerro que ya olvidé su nombre, habían pocas personas allí. Arrendamos una sala de bolos donde jugamos solo algunos de mi equipo porque aquí los recintos eran más pequeños. Llevo ¿dos días aquí? Y lo mejor que puedo hacer siempre, es volver a los brazos de la persona que amo.

Intranquila camino por el backstage, veo la hora y ya es tiempo de salir. Mi mirada se fija al cielo, las estrellas acompañan la noche azulada, a pesar de que ya es tarde, sigue haciendo calor. Me han contado que los diferentes estados o regiones de aquí, son preciosos y si para mi esto me parece maravilloso, imagínense cómo de asombrada estaré si llego a recorrer este angosto país. 

—Esto es para la persona más importante, la que tocó mi corazón, lo tomó y lo llevará siempre en sus manos —susurré, la multitud grita el doble cuando me ve salir—. ¿Cómo se sienten hoy, chicos? ¿Listos para soñar? Porque yo lo estoy haciendo y es mejor que la realidad.

La primera canción del setlist suena de fondo, se me rompe la voz a veces y dejo que ellos canten. Son el público más eufórico que he tenido desde que empezó la gira.

— ¿Saben? Este es un concierto muy íntimo a pesar de que seamos ¿cuántos? ¿Cincuenta y seis mil personas? Oh, vaya, eso es magnífico ¿les gustó la canción? —Gritos y más gritos—. Bueno, hoy añadiré algunas que ni mis músicos tenían planeado, incluso; acabo de hacerlo —rio torpe—. El tour lleva aproximado un año y algo, pasaron tantas cosas y pensar que está llegando a la recta final hace que me cueste respirar ¿así se siente cumplir un sueño? Porque es bueno y malo, el tiempo pasa tan rápido que apenas nos damos cuenta cuando perdemos algo o alguien. Bien, la siguiente canción trata sobre eso, porque es la última oportunidad para muchos esta noche. Espero que les guste.

La pista de One last time sonó de fondo, la sacamos directo desde el estudio. La terminamos ayer y pasamos la noche en una cabina tanto haciendo el trabajo para el dúo con Zayn como esto, aproveché a descargarme con muchas letras. Producí muchas de las canciones que escribí en la gira, escribí dos esa noche. Fue largo, dormí toda la mañana.

—Es algo nuevo, cuenta muchas historias ¿no? ¿Alguien se sintió identificado? ¿Tienen su última oportunidad? —Sentí que no me entendían del todo, pero estaba siendo sincera con ellos—. ¿Serían felices si alargara esta noche? Estoy muy inspirada y quizá me lleve un sermón de parte de mi equipo, se cansarán bastante —me acerqué a Taylor—. Taylor es una persona esencial en mi vida desde que la vi entrar por una puerta blanca diciendo ¿aquí hay una audición? Reí bastante ese día con esta chica, era bailarina de Justin. Lo siento Bieber por robarte a personas tan maravillosas de tu equipo —lo miré—. ¿Quieres venir a saludar? A la audiencia le encantaría verte.