Nora:

1.8K 101 17
                                    

Pasé la noche en el hospital. Patch estuvo toda la noche en el sofá de mi habitación, atendiéndome. Era tan lindo.

– traté de bajarme.

– ¿ qué necesitas ángel? – se puso a mi lado para ayudarme.

– quiero ir al baño.

Asintió y me ayudó.
Salí y me acostó.

Una enfermera entró con una camita con ruedas.

– alguien ya tiene hambre.– dijo cantando.

Acomodó la cunita a un lado de mi cama.

– tengo buenas noticias – dijo observando a Patch abrazarlo.– ya no te lo voy a retirar. Se quedará aquí con sus papís por que ya es un bebé fuerte – ella era una enfermera muy amable. Las anteriores fueron quitadas del cuidado de mi bebé por órdenes de Patch y fue  como la asignaron a ella de todas las demás, pues él las observó para poner a prueba su capacidad para cuidar bebés recién nacidos. ¿ exagerado quién?

– bueno, linda. Los dejo. – se retiró.

– ¿ podrías deshacer el nudo trasero de mi bata , por favor? – le pedí a Patch. Me entregó al bebé, el cual estaba llorando a todo pulmón.

– tranquilo, mi amor ya voy.– lo mecí

Desesperado buscó mi pecho hasta llegar a él.

– al parecer tiene prisa – se mofó Patch.

Me reí.

Abrió sus ojitos por primera vez.

– que lindos ojitos mi bebé – le dije.  Admiré el color azul.

Patch besó su coronilla.

Suspiró, pasando sus manos por su rostro.

– ¿ todo bien?– le pregunté.

Lo pensó un momento.

– estoy desesperado, ángel. – lo miré con curiosidad. – antes de encontrarte , había encontrado a Abner, nuestro hijo. Cuando fui a verlo ya no lo encontré y su hogar estaba totalmente destruido.
Me dijeron que escapó de unos tipos que, por cierto. También atacaron a Eider. Y desde entonces por más que lo he buscado, no he podido encontrarlo. Ni a Dominick , a él no lo he visto, no sé en dónde está.

Patch le acomodó el gorrito al bebé.

– temo lo peor – admitió.

– no, Patch. Por favor dime que están bien, me muero si les pasa algo – una lágrima bajó por mi piel .

Patch me abrazó.

– los voy a encontrar,  buscaré día y noche. Tengo que saber algo de ellos.– dijo con determinación.

Mi pequeño se separó y quiso llorar.

– que pasa – traté de evitar que llorara.

– tal vez ya se le haya acabado.– comentó.

Lo cambié de brazo.

– si. – reí. – tenía más hambre.

– eres un glotón – dijo Patch besando sus mejillas.

Una enfermera se asomó por la puerta.

– señorita Grey, hay un joven allá a fuera que dice ser el papá de su hijo.– observó a Patch.

Sentí el poder de Patch elevarse.

Se levantó de golpe.

– No Patch. Por favor, no peleés.– lo detuve del brazo.

Finale (Parte II)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora