Nora:

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– Patch, tengo miedo.– lo abracé cuando todos se fueron y quedamos él y yo en nuestra habitación.

Me abrazó muy fuerte, tanto que sentía que me integraba a su cuerpo.

– no me gusta saber que sientes miedo cuando yo estoy aquí. Me van a tener que matar antes de que te lleven, voy a pelear con todo mi ser, ángel.

Mis lágrimas se resbalaron sobre su pecho desnudo.

Bajó sus labios a mi frente y presionó.

Me miró fijamente.

– me encantan tus ojos. – y me mostró una sonrisa de ternura.– me volvería loco si tuviera que dejar de mirarlos.

Me sacó la sonrisa.

– así está mejor. – metió mi cabello detrás de mi oreja.

Estaba a punto de decir algo cuando Damián lloró.
Fui hasta su cuna y lo abracé.
En cuanto lo hice , se rió.

– pequeño mentiroso.

– que buen actor eres – dijo Patch tomando su manita.

– ¿quieres jugar?– lo llevé a mi cama y le dí un par de juguetes que Patch le había comprado.

Patch se puso a jugar con él.

– sabes,ángel. Si logramos hacer que el embarazo de esa chica se logre hasta el final sin que los arcángeles se enteren, podríamos saber con mucha más facilidad si es hijo de Abner o no.

– ¿ pero qué pasó con lo de Katherine?

–  es muy pequeña aún. Si la sometemos a ese estrés tendrá dolores de cabeza muy fuertes por que presionará demasiado a su cerebro. y no quiero eso para ella.

Reflexione lo que me decía y tenía mucha razón.

– y cómo sabrás si es su hijo o no.

– fácil. Al tenerlo cerca sentiré si es sobre humano o no. Es hijo de un Gelim , tendrá que desprender un nivel de energía alto desde el momento en el que nazca.

Damián aventó su biberón.

– no, bebé. Eso no se hace.– le dije.

Dominick estaba empeñado en encontrar a Angelik. No hemos sabido nada de ella desde la última vez que la vimos y cuando Patch estuvo en el cielo, no la vio por ningún lado.

– Patch, crees que tengan encerrada a Angelik?

– si pero no en donde tenían a katherine.

– Dominick está muy alterado buscándola y me preocupa que vaya a hacer una tontería.

– problemas y más problemas... – exhaló.

*****

Al día siguiente salí para ir al supermercado. Patch se quedó con el bebé en casa.
Estacioné la camioneta, cerré todo, antes de dar el primer paso un brazo fuerte me rodeó la cintura , apretándome. Apenas y pude gritar cuando me pusieron un pañuelo en la nariz sin poder respirar nada que no fuera el tremendo olor que despedía. Se me nubló todo y mi cuerpo se aflojó.

Patch:

Miré el reloj , habían pasado 4 horas desde que Nora salió. Esto no me gustaba nada.

Le puse un suéter a Damián.

– tu madre ya demoró demasiado, me está preocupando. – hice conversación con mi bebé mientras lo aseguraba en su silla para el auto.

Finale (Parte II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora