Finale (Parte II)

Rommel:

Me sorprende que katherine no ha salido, es algo inquieta.
No me quise confiar y encendí el busca, indicaba el centro comercial.

Miré el cielo y pedí paciencia.

***

La encontré a punto de entrar a una tienda de ropa cuando la detuve.

- ¿ por qué no me dijiste que saldrías? - traté de sonar paciente.

- solo vine a comprar ropa.

- katherine, así solo sea ir al jardín de tu casa,Avísame.

No contestó nada, así que le cambié la charla.

- ¿qué vas a comprar?

- nada en especial, solo... ropa.

Fruncí el ceño sin comprender lo que dijo, se metió a la tienda y la seguí.

Se probó un vestido, blusas y muchas cosas más. Rechazaba algunas prendas por que no le gustaban, lo que no sabía es que ante mis ojos lucía hermosa con lo que se pusiera.

Me entretuve un momento con el móvil, apareció de un brinco.

- ¿ podrías pagar esto?- me entregó un montón de ropa- aquí tienes el efectivo.

- ¿ a dónde vas?

Iba muy escurridiza.

- olvidé algo...

- te espero para pagar

- no, adelantate.

Estaba algo nerviosa.

Llevé sus encargos a la caja y dí el efectivo que me entregó.

Fue rápido así que la busqué en la enorme tienda. Por fín, ví una melena rubia en una sección de la tienda... íntima, diré.

Me paré detrás de ella, justo cuando miraba sostenes.

- ese rojo te quedaría muy bien...- le dije en el oído.

Saltó del susto y escondió el sostén.

- ¿ por qué no dices que estás detrás de mí?

- ya veo por que me dijiste que me adelantara.

- ¡sí! Por eso no te dije que saldría.

- de cualquier forma el rojo está muy bien, y el blanco de allá, y el negro, con el rosa te verías más tierna...

Me arrojó un puñado de bragas.

- ¡ya! Esperame a fuera.

- lleva esto- le entregué un juego de lencería de dos piezas en color blanco- te verías tremendamente sexy sin dejar tu lado inocente.

Se sonrojó.

- ¡sal de aquí ,ya!

Levanté las manos en señal de rendición

Le abrí la puerta de la camioneta , al tratar de subir ya que era algo alta la camioneta, se quejó de algo y se detuvo.

- ¿ qué pasa? ¿ te duele algo? - se recargó de espaldas.

- sí, me duele algo...- hablaba forzada. - es insoportable.

- ¿ es muy fuerte el dolor?

Asintió , su rostro se puso pálido.

- esto no me está gustando, nada.

- hace unos días se presentó el dolor pero se ha ido intensificando.