Parte de mí [Goku X Bulma] °En Edición°

-Noche esperada

Goku taciturno, desvió su mirada hacia la parte superior de su torso, parecía pasarle algo, tal parece que había estado sintiendo molestias en el pecho, comenzó a dar unos golpeteos sobre él.

Tan solo continúe mirando su nuca esperando a que respondiera.

De un momento a otro, el aura y ánimo de Goku comenzaron a cambiar, la atmósfera se tornó a una de seriedad, algo atípico de él. Gateando me trasladé para poder observarlo de frente.

—¿Qué ocurre?.— Pregunté preocupada por ese cambio de ánimo tan repentino.

Goku guardando silencio, meditó mirando el césped unos momentos.

—Algo extraño me ha estado pasando.— Rompió el silencio.

—Durante un tiempo comencé a sentir unos malestares en el pecho.— Relataba mientras ponía una mano sobre él.

Me miró dudoso y con extrañeza unos segundos para continuar su narración.

—La verdad, pensé que era por comida.— Miró el cielo de manera afectuosa tomando su barbilla. —Así que, me puse a comer mucho, sin embargo, ésto no cesó.—

Desvió su oscuro iris en dirección al horizonte.

—Ahora, en este último tiempo, el dolor ha vuelto a aparecer, no sé que podrá ser, nunca lo había sentido.—  Me miró con la inocencia misma reflejada arqueando levemente sus lindas cejas.

La brillante luz proveniente de las estrellas que iluminaban la noche, se reflejaba en sus ojos, haciendo un contraste de color que no pude evitar mirar con detención.

Tras decirme estas palabras, aquél día en el que nos acostamos volvió a mi mente junto con las palabras que entre balbuceos el me dijo: "T-te v-veo y vuelve".

Otro flashback donde el me mencionó un malestar volvió a mi mente, interrumpiendo mis pensamientos Goku prosiguió:

—Intentado calmar los dolores que van y vuelven a mi pecho, fue como conocí este lugar, luego de eso, lo utilice para mi entrenamiento mental, me hizo sentir mucho mejor estar aquí.— Respiró profundamente mientras cerraba los ojos y sonreía.

Tras las palabras que acababa de escuchar, un vaivén de preguntas estremecieron mi mente, ¿acaso de verdad estaba enfermo?, quizás..., ¿Siente cosas por mí?, imposible.

No me atrevía a descartar aquella opción, estaba dispuesta a indagar, pensé en un plan para averiguarlo, no pensaba quedarme nuevamente con la incertidumbre y que la duda me carcomiera todos los días.

—Sé que te puede ayudar.— Lo miré fijamente determinada a buscar respuestas.

—¿Eh?— Me miró curioso esperando una respuesta.

Guardando silencio, me aproximé acortando nuestra distancia.

—A partir de ahora, sólo guíate por lo que sientas y tus instintos, ve si tu malestar cambia.— Espeté secamente mientras continuaba observándolo a sus ojos brillantes.

—¿Y eso en qué me va a ayudar?— Dudó indagador.

Posé mi dedo pausadamente sobre su boca y lo hice callar. El silencio en ese momento fue sepulcral, sólo se escuchaba el sonido de algunas aves del sector y el agua de la vertiente del lago en el que ambos estuvimos.

Goku se encontraba pasmado, al igual que yo, no pronunciaba o articulaba palabra alguna.