Capitulo 1

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-Atsushi-kun puedes ir por un encargo? estoy muy ocupado y tu puedes llegar mas rápido, ten aquí tienes la dirección- Recordaba el Albino mientras caminaba por las Calles de la poblada Yokohama.

-Dazai-san solo estaba estirado en el sillón, por que le dije que iría- Murmuró para si mismo para luego resignarse sacando un suspiro -Lo Bueno es que Hoy hace un buen día- Sonríe ya con su ánimo restaurado, simplemente caminar entre las personas y el agradable viento le aliviaba.

Ya había pasado un mes y medio de la batalla contra Guild , la port mafia había prometido que no atacaría a la agencia ni a sus miembros. Eso era lo que ponía a Atsushi tranquilo al menos un poco ya que viniendo de la port mafia no se podía confiar del todo, mas por cierta persona que siempre realiza movimientos por su propia cuenta.

Camino casi llegando a su destino hasta que de pronto escucho que alguien le dirigía la palabra -¡¡Hey chico quieres una prueba de nuestro nuevo licor!!- Le habla una mujer ya un poco mayor de edad.

-¿Yo?- ella asiente -... eh... Lo siento no soy bueno con bebidas alcohólicas- Trato de sonar lo mas gentil que pudo por estar tratando con alguien mayor aunque decía la verdad.

-Entonces puedes darle una muestra a tus padres o amigos- le guiña el ojo de manera divertida -Con eso quizás pueda expandir mi negocio y ellos tomaran algo gratis, es una buena oferta ¿cierto?-.

El Albino pensó antes de responderle, Kunikida-san ya le había mencionado que no confiara en personas que daban cosas gratis, sabiendo que él albino era muy ingenuo. pero para Atsushi la mujer se notaba sincera y amable, solo queriendo que su negocio progresara.

-.....Esta bien llevare la muestra , estoy seguro que Dazai-san le gustara probarlo- le sonríe pensando en el castaño.

-¡Bien! ten aquí una botella por ser la primer persona en prestarme atención- le entrega la botella - Espero que a esa persona que mencionaste... le guste- sonríe.

Con botella en manos se despide de la mujer y encamina un poco mas acelerado hacia el encargo que le pidió Dazai, ya estaba tardando.

-Mmm... Dazai-san creo que exagero con esta dirección- dijo observando que entre más caminaba no llegaba a su destino -Estoy cansado- se quitó el sudor de la frente y pensó lo tonto que fue por no traer dinero, al fin recordó la botella que traía consigo -C-creo que probar un poco no vendría mal- Se detiene y alcanza ver un callejón y corre para adentrarse un poco. Por cierto era él mismo callejón donde conocio por primera vez a Akutagawa solo que este sumergido en la curiosidad no lo noto, por qué era imposible que no recordara el tétrico momento.

Con un poco de nervios se atrevió a beber un sorbo, solo era para aligerar lo seco de su garganta -Es fuerte- tosió, hace una mueca divertida -Si que no soy bueno en esto de beber, sabe bien?-pregunto a la nada realmente no lo disfruto pero le quitó un poco la sed.

-No se si sabe normal o tiene algo mal... Definitivamente... tengo que llevarlo conmigo...- cada vez más le costaba hablar -Para... que lo puedan exami...- no pudo terminar la frase, comenzó a sentir su cuerpo extraño y también estaba mareado, se pegó a la pared y se deslizo.

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¿Coincidencia o destino? no sé sabe pero el perro de la Port Mafia junto con la rubia terminando su trabajo salieron de lo profundo del callejón, la chica fruncio su entrecejo al ver un bulto a lo lejos alertada saco su arma -El chico tigre! -dijo la Rubia observando al albino más alerta, Akutagawa vio molesto a Atsushi simplemente con verlo le molestaba.

¡¡Un Bebe de Akutagawa!!Where stories live. Discover now